Ante los despidos recientes de trabajadores federales en el IMSS Bienestar en Chihuahua, el secretario de Hacienda del estado, Jesús Granillo Vázquez, expresó su preocupación y esperanza de que esta situación no sea una represalia por parte del Gobierno Federal.
Granillo Vázquez aseguró que se asegurarán de que los servicios de salud, que son obligación del estado, no se vean afectados por estos despidos.
El funcionario explicó que para resolver la situación de los empleados despedidos, primero necesitan conocer los detalles exactos de lo sucedido. Por ello, mantendrá comunicación con el secretario de Salud, Gilberto Baeza, para revisar los convenios entre el IMSS Bienestar y el estado y determinar cómo brindar apoyo.
Granillo Vázquez enfatizó que el estado no dejará sola a la sociedad chihuahuense en esta situación y buscarán garantizar que los servicios de salud sigan funcionando correctamente, como han hecho en otras ocasiones frente a decisiones del Gobierno Federal.