Por: Punto…
Ha tardado cinco meses, cinco meses de odisea, pero parece que pronto pudiera llegar a su fin la insostenible situación para las y los teachers del nunca bien ponderado Programa Nacional de Inglés (PRONI) de Chihuahua, cuyos pagos ya habrían llegado desde México y estarían ya en las arcas de la Secretaría de Hacienda estatal para su dispersión “durante la primera quincena del mes de mayo”.
El administrador financiero del PRONI en Chihuahua, Jesús de la Rosa, dio la buena nueva el viernes a través de varios grupos internos, anunciándoles que por fin y tras mucho implorar, habemus recursos.
“El recurso del Programa Para cubrir los pagos a cada uno de ustedes ya está en Secretaría de Hacienda de Chihuahua, atendiendo todas las gestiones administrativas estaremos en la posibilidad de realizar la dispersión del recurso (los pagos ) durante la primera quincena del Mes de mayo”, fue el mensaje que recibieron y que esperaban, nunca mejor dicho, “como agua de mayo” los 300 teachers de toda la entidad tras meses viéndoselas y deseándoselas para poder sostener a sus familias.
CORTARON LA FOTO. Quién sabe si fue sin querer o sin querer queriendo, pero lo cierto es que en la primera publicación de la Sección 42 del SNTE presumiendo la inauguración del edificio que albergará las nuevas oficinas de las delegaciones sindicales de Meoqui, las imágenes de quienes encabezaron el evento se cortaban y dejaban fuera a la secretaria delegacional de la D-I-23, la maestra Elena Gómez Bejarano.
Ésta no se dejaba y no dudó en externar su malestar por el agravio, de forma graciosa pero poniendo el dedo en la llaga. La maestra compartía una imagen del acto inaugural en la que se veía al profesor Ever Avitia y otros cuatro maestros y la acompañaba del siguiente mensaje:
“Como cuando me ponen en la orilla para poder cortarme de la foto jaja Siempre soy el Mike Wazowski en las fotos de la sección! #NoLeHace ya tenemos las oficinas de la D-I-23 y la gente sabe de dónde vino la gestión #YaDije.”
Más tarde, en el mismo tono gracioso la maestra publicaba una “corrección photoshopeada” en la gracias a las nuevas tecnologías su rostro había sido agregado a la imagen compartida por la Sección 42.
Y su mensaje llegó. Y además de llegar, caló. Tanto es así que los magos del Facebook, capaces de rehacer, deshacer y desaparecer publicaciones cuantas veces sean necesarias, hicieron de las suyas. Desde el Comité Ejecutivo deshicieron el entuerto, agregaron más imágenes a la publicación original e incluyeron varias en las que aparece la secretaria delegacional y el resto de participantes y la maestra a su vez corría un tupido velo sobre sus mensajes y aquí todos felices.