Por: Rosa Lilia Cardona Muñoz
El origen del día de muertos se originó en la cultura mesoamericana, adoraban al dios del inframundo Mictlantecuhtli.
Con la llegada de los españoles, la celebración se hizo mestiza y se unieron nuevos elementos y significados católicos, por ejemplo la cruz.
La conmemoración empieza desde el 31 de octubre con veladoras encendidas, al siguiente día, las personas rezan y ponen ofrendas dentro de sus hogares, en memoria de sus familiares.
Algunas personas optan por pasar la noche en los panteones para charlar o cantarle a sus seres amados que partieron antes que ellos; en el Día de Muertos, según la tradición, los seres queridos que han fallecido regresan para estar con sus parientes.
Cabe recordar que la festividad es considerada por la Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad, además, es un símbolo de la identidad nacional para los mexicanos.
Tradicionalmente los altares u ofrendas suelen estar diseñados de varios niveles, según las tradiciones familiares: los de dos pisos representan el cielo y la tierra; los de tres pisos representan el cielo, la tierra y el inframundo, mientras que los de siete pisos indican los niveles que atraviesan las almas para llegar al descanso eterno.
Algunas culturas creen que los siete niveles representan los siete pecados capitales, mientras otras como la azteca creen que los siete niveles son los escalones que tienen que pasar los muertos para llegar al Mictlán o el inframundo.
Así recordó a su padre la Coordinadora del Distrito 17 de Morena Mtra. Rosa Lilia Cardona Muñoz este día de muertos al Profr. Socorro Adolfo Cardona Rodríguez que este año dejó su vida en el umbral de la posteridad, hombre de campo de Talamantes, Chih., desde pequeño fue muy trabajador dedicó gran parte de su niñez y adolescencia a la siembra de nogales y árboles frutales, a la cría de cerdos y chivas y se divertía mucho pescando, ya de adolescente trabajó cómo minero probando suertes y ya cercano a los 30s. se fue a radicar a la Cd. de Camargo, Chih., sin educación alguna trabajó de conserje dónde conoció a mi madre la Profra. Crispina Muñoz Soto en la misma escuela dónde trabajaba, quién lo impulsó a estudiar logrando un grado y otro hasta llegar a la Normal Básica y a la Normal Superior con Especialidad en Historia; formó una familia y siempre tuvo en la mente que el estudio abría muchos caminos…el camino de la libertad, pensamiento que nos dejó como legado a sus tres hijos.
Como Profesor de Historia consciente de la realidad política y social del pase afilió al Partido Comunista Mexicano, clandestino en aquella época y se volvió un lector asiduo de poemas, canciones, chistes, lectura política y eso nos transmitió a sus hijos y nietos.
A luchar por los más desprotegidos tuvo una mente muy brillante y lúcida, siempre declamó el bonito poema “El Sembrador” de Marcos Rafael Blanco Belmonte.
HAY QUE LUCHAR POR TODOS LOS QUE NO LUCHAN!!!
HAY QUE PEDIR POR TODOS LOS QUE NO IMPLORAN!!!
HAY QUE HACER QUE NOS OIGAN LOS QUE NO ESCUCHAN!!!
Eso dice un extracto de este poema.
Y así fue su vida como Maestro que por apoyar un Movimiento Social en el 2006 el Issste le retiró sus derechos pensionarios y lo dejaron con un 40 % de su pensión hasta el día de su fallecimiento. Ayudó a los más pobres, al gringo Steve su inseparable amigo que fue casi su hermano, un hombre que la vida lo atrajo hasta esta ciudad de Chihuahua y que mi padre le dio cobijo.
Disfrutamos mucho su compañía era filósofo, narrador de anécdotas, contaba chistes, declamador de poemas.
Las Mentiras era una de sus preferidas porque su letra era eso mentiras y cómo se reía…
Ahora que estamos de fiesta
vamos a contar mentiras tra la la, vamos a contar mentiras tra la la,
Al salir del campamento
con hambre de seis semanas,
me encontré con un manzano cargadito de ciruelas tra la la.
Empecé a tirarle piedras tra la la
Y caían avellanas tra la la
Con el ruido de las nueces
Salió el dueño del peral
Muchachos no tiren piedras que no es mío el melonar
Es de una pobre viuda
Que vive con su marido tra la la…
Cantaba canciones el Piojo y la Pulga y en estas fechas cantaba la canción de “Seremos” recordando su niñez en Talamantes, Chih.
“Angelitos somos
Del cielo bajamos a pedir limosna y si no nos dan puertas y ventanas nos la pagarán
Seremos, seremos calabacitas queremos”
Cómo chistero tenía una frase famosa que todos lo recuerdan con una sonrisa:
Bueno y cambiando de tema… Cuando pagan????
Terminó su vida sembrando cómo lo hacía de niño y haciendo alusión al poema,
¡Hay que vivir sembrando! ¡Siempre sembrando!, a eso se dedicó los últimos años de su vida a cuidar 9 nogales, plantas y árboles frutales que tenía en su casa.
También recordando a la Lic. Blanca Estela Ojeda Campos, Lic. en Admon. de Empresas y Lic. en Derecho, sus familiares la recuerdan como una persona generosa y culta, como abogada defensora de la problemática de las mujeres.
