Por: Rosa Lilia Cardona Muñoz
Creo que el mayor debate que he tenido es entre la vida y la muerte. Todo lo que quería decir, todo lo que quería expresar ahí se quedó en espera no hubo condición para continuar y es que las horas sólo importan para vencer esta terrible enfermedad del Covid 19.
Tuve la enorme fortuna de tener a tanta gente hermosa que me dieron auxilio en los momentos de urgencia cuando un tanque de oxígeno era la diferencia. Mis sobrinas, sobrinos, mis primas cuán agradecida estoy con la vida por haberme enviado estos Ángeles porque eso fueron. No se diga de mi Guerrero de Bata Blanca mi hijo, el médico día y noche, incansable cada cuatro horas sin descanso cuidando a su madre más que a una paciente y a mi querida hija una guerrera que no bajó la guardia hasta que la terrible enfermedad la alcanzó también. a mi marido mi compañero de tantas batallas, también no me dejó ir en esta aunque cayó también. Pero ya se están recuperando ambos.
La solidaridad y la humanidad son dos valores universales que en estos tiempos de crisis sanitaria resurgen como un brillo candente dispuestos a dar siempre a dar hasta que duela como dice la Madre Teresa de Calcuta dar aunque duela y si duele aún dar más.
Otra gran reflexión se queda en lo terrenal, Nuestro Sistema de Salud. Casi creo que cuando mi padre lo tuve internado en el hospital del ISSSTE ahí me contagié. Las condiciones insalubres que imperan en el hospital, la falta de personal médico, la falta de medidas protocolarias ante pacientes Covid,… dejan una tarea muy grande, revisar todo el sistema de salud pública.
Otra denuncia pública la quiero hacer en este espacio. En los momentos de emergencia respiratoria tuve que buscar una cama en un hospital y no encontré ninguna. Anduve con mi hijo primero en el Central NO me quisieron atender aduciendo que tenía ISSSTE y a pesar que llevaba la saturación muy baja nos fuimos al ISSSTE y la situación fue más deprimente.
Me tomaron los datos y me enviaron a un cuartito sin sillas y con 8 mujeres adelante de mi todas pacientes Covid. Me dijeron “no hay médico, hay que esperar”. Ahí a un metro estaban como veinte personas sin protocolo ni manejo. Me dio terrible tristeza ver a esa gente expuesta tan vulnerable.
Nos fuimos a la Clínica del Centro sin éxito y sin camas de nuevo. Por último, habló mi hijo al 911 para solicitar una ambulancia y le dijeron que no había camas en toda la ciudad EL SISTEMA DE SALUD COLAPSADO. Nos regresamos a la casa y sólo consiguieron mis hijos una videollamada con una Neumóloga que nos dio una esperanza.
Tuve la fortuna de tener una familia, un fondo económico, que me ayudaron en lo individual. Me pregunto por toda la gente que no tiene estos medios. Debemos seguir luchando por lograr que haya una redistribución de la riqueza. Necesitamos más y mejores empleos para la gente bien remunerados. Más oportunidades de educación, de desarrollo, para nuestros jóvenes, para nuestros ancianos. Una vida digna y para nuestra gente.
21 Días que se quedarán para la Historia nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador necesita guerreros y guerreras dispuestas a dar si es posible hasta nuestra vida por este Proyecto de Nación.
Estamos listas Vida nada te debo… Vida estamos en Paz. Seguimos luchando por la 4ta. Transformación