Por: Rosalío Morales Vargas
Un pregón de murmullos
viene del sur,
crece cual marejada
o como alud.
El eco de esas voces
hoy se agiganta,
surge de lo profundo
de Ayotzinapa.
Es ausencia que grita,
está presente,
vivifica la lucha,
no es cosa inerte.
Fragmenta el aire denso
de la perfidia,
la atmósfera pesada
con aura limpia.
Y rompe las cadenas
que imponen bestias,
agitando los puños
de la insurgencia.
Encontrar la verdad
es el camino,
el sueño libertario
no está perdido.