CDMX.– El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, se adelantó a una eventual filtración en los medios de comunicación o en redes sociales, respecto a su opinión expresada a un legislador oaxaqueño sobre los cabilderos que han pretendido influir entre legisladores para frenar reformas a las leyes.
Esto, al ser cuestionado sobre la reforma al apartado 20 “b” a la Ley de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes que se discutirá en el Congreso de Oaxaca, respecto a prohibir la venta, regalo, promoción o distribución de productos no saludables en las escuelas, propuesta que consideró muy acertada.
“Le comenté, por la experiencia ya vivida a nivel general, el riesgo de que se infiltren todo tipo de cabildeos, y presiones de grupos de interés económico que suelen interferir con el esfuerzo legislativo, ya sea presionando o a veces confundiendo la interpretación o la visión de los propios legisladores”, indicó en la conferencia de prensa vespertina sobre covid-19, en la que se le preguntó sobre esta regulación a la comida chatarra.
“Todo esto se lo dije tal cual, se lo dejé en un mensaje grabado. Si en algún momento se filtra en las redes, como suele ocurrir, no tengo nada que ocultar, eso fue exactamente lo que dije, y con todo el respeto que me merece la soberanía del estado de Oaxaca, tanto su Poder Ejecutivo como su Poder Legislativo, expreso mi opinión muy favorable a esta iniciativa de ley y deseo francamente, por el bien de la salud pública de México, que se logre promulgar esta ley”.
Señaló que hoy mismo platicó de la ley contra la comida chatarra con el diputado Héctor Sosa de Oaxaca, a quien le expresó los paralelismos con los esfuerzos que hace el gobierno mexicano por una sana alimentación “y le externé mi deseo de que puedan salir con éxito esta pieza legislativa”.
López-Gatell aclaró que la mala alimentación no es un acto voluntario, por lo que no se puede responsabilizar o culpar a los individuos, sino hay que propiciar las condiciones necesarias para que haya una buena alimentación y uno de los elementos cruciales es la oferta alimentaria mexicana, lo que se tiene a la mano para poder alimentarse.
“A lo largo de los últimos años, ya no tan recientes, unos 20 o 25, ha proliferado exponencialmente la oferta de productos industrializados procesados o ultra procesados que tienen enormes cantidades de azúcar o de azúcares, principalmente fructuosa, sal, grasas y en general calorías.
“Cambiarlo significa tener una mayor oferta no solamente en términos materiales sino de asequibilidad, es decir, el precio accesible, a los productos naturales, particularmente a los de producción local, que son, en general, los que pueden ser más saludables”, mencionó.
Multa por cubrebocas
En cuanto al rechazo de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, a una propuesta de Morena de multar a quienes no usen el cubrebocas, el funcionario compartió la postura.
“Todas las medidas de salud pública que hemos implantado, hemos hecho énfasis en no focalizarlas en los individuos, por una larga historia en México de una procuración de justicia y deficiente e historia de violaciones de los derechos humanos cometidos al amparo de la fuerza pública.
“Entonces, en un momento de tensión social, si uno agrega el carácter punitivo de las acciones de salud pública se perturba el sistema, se vuelve difícil de regular en su justa dimensión y acaban siendo las personas en lo individual a los que se les culpa de la salud colectiva”, añadió.
López-Gatell explicó que esto se ha visto en las redes sociales donde se han pedido acciones de represión en contra de otras personas porque los ven sin cubrebocas o hacen alguna acción que a su propio juicio les parece que pudiera estar afectando a la salud pública.
Por eso, afirmó, en el acuerdo que estableció la Jornada Nacional de Sana Distancia pusieron una cláusula bien específica que deja en claro que toda medida de salud pública se debe hacer con absoluto respeto a los derechos humanos.
“Entonces, en ese sentido, es notorio como Sheinbaum, una mandataria estatal que ha tomado una enorme responsabilidad en sus manos y que a nuestro juicio ha tenido una conducción excelente de la epidemia en la Ciudad de México y que ha sido quien desde tempranamente incorporó ella misma y como una disposición para la ciudad el uso del cubrebocas. Sin embargo, pone un límite claro cuando dice sí, pero con una recomendación y no como una obligación, y quiero suponer que es por razones semejantes a las que estoy comentando”, apuntó.
Sobre el abuso en el precio de los medicamentos, López-Gatell resaltó que uno de los instrumentos para lograr la supervisión y sanción es la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y en uno de los primeros acuerdos intersecretariales existe una cláusula específica para sancionar a quien abuse de los precios en los medicamentos.
Fuente: proceso.com.mx