El padre jesuita Javier «Pato» Ávila Aguirre manifestara que la sensación de inseguridad en la Sierra Tarahumara, y en especial en Guadalupe y Calvo, no había cambiado nada, e incluso apuntó que serían mentira los anuncios oficiales sobre desarticulación de bandas del crimen organizado. Al respecto, el secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya Chávez, afirmó que, si bien era muy válida y respetable la impresión y la percepción del «Pato» Ávila, la situación en la Sierra es muy diferente a la de hace un año. Manifestó que lo primero que se debe hacer para cambiar la situación es el desmantelamiento de las bandas delictivas, lo cual consideró que sí se ha hecho. Sostuvo que la situación no tiene nada que ver con la existente durante los cinco años de la anterior, cuando aseguró resultaba imposible andar en la Sierra. No obstante, reconoció que esta situación no se puede cambiar de la noche a la mañana.
«Es muy válido lo que él comenta», empezó señalando el titular de la SSPE, para acto seguido enfatizar que «el tema de la percepción y del sentimiento no es algo que se cambia de un día a otro».
En este sentido, Gilberto Loya manifestó que lo primero que se tiene que hacer para que la percepción o el sentimiento de inseguridad cambie es el desmantelamiento de las bandas delictivas. «Creo que ese paso lo hemos dado y lo hemos dado de una manera muy concreta, muy fuerte, muy clara, con el combate que tenemos a la delincuencia».
«Creo que es el primer paso ya se dio y creo que el siguiente paso es un paso que no solo corresponde a la Secretaría de Seguridad Pública, sino que nos corresponde a todas y todos no, a las instancias de gobierno, a la misma ciudadanía y por supuesto también a las instancias religiosas que están desplegadas allá», prosiguió señalando el secretario de Seguridad Pública Estatal.
Loya afirmó que la situación es muy diferente a la que se encontraron a su llegada en el último trimestre del 2021. Afirmó que una muestra es que en semanas pasadas la Sierra albergó una congregación de una gran cantidad de jóvenes evangélicos y próximamente habrá otra, lo cual contribuye «a incrementar la confianza de la ciudadanía, pero en segundo lugar también para poder generar ese vínculo social que deben de tener y debemos de tener las instituciones policiales con los mismos miembros de la comunidad·».
El por eso que el secretario reiteró que considera que «hemos avanzado bastante, no digo a lo mejor todavía el sentimiento o la percepción de inseguridad, pues todavía no se va del todo. Pero algo que es muy palpable allá y que me tocó palparlo a mí, que lo hemos palpado todos los que hemos estado allá, pues es que hay un ambiente muy distinto al que había hace un año. ¿A qué me refiero con eso? A que hay mucha gente en la calle y muchas muchos niños jugando en las plazas, hay cosa que no veías hace un año».