Nuevo Casas Grandes, Chih.- Algunos docentes de la Región Paquimé trasladaron ayer a los integrantes del Comité Ejecutivo de la Sección 42 del SNTE, Martha Ramírez y Juan Carlos Terrazas, el malestar existente entre cierto sector del magisterio de la zona ante la pasividad de su sindicato en algunas cuestiones y los emplazaron a solucionar el conflicto con los maestros jubilados de la Comisión Síndica Genuina, así como el deficiente servicio de Pensiones Civiles del Estado, denunciando que ya tenían hasta que pagar por las muestras de orina. Esto después de que el pasado enero las deficiencias quedaran exhibidas tras el accidente carretero sufrido por el maestro Emilio Casavantes Reyes cuando viajaba a una reunión sindical.
Entre otros intervinientes, un joven maestro tomó la palabra para lamentar que «se ha caído últimamente en una tendencia el sindicato a esperar que los problemas trasciendan (…) para solucionarlos. Como bien dice la maestra es un problema de salud y la salud no espera. Entonces, ustedes, como representantes nos representan y tienen que anticiparse a esas situaciones».
Reprochó que en anteriores reuniones se llegara a plantearles que debían esperar a que el problema fuera crítico, a lo que dijo «no, ya es crítico, estamos hablando de que se tiene que pagar por un examen de orina de una urgencia, hablarle a usted, hablarle a Jaime, es una urgencia y las urgencias no esperan».
Pidió a los enviados del Comité que explicaran a la base de la región qué iban a hacer para que esto no se repitiera o que de lo contrario no obligaban a adoptar otras medidas como la de tomar las instalaciones como estaban haciendo los jubilados.
Les recordó, alto y claro, al Comité que «el sindicato somos todos, que unos estemos aquí y otros estemos allá, todos vamos en el mismo barco, yo creo que de los errores se tiene que aprender».
Pero no se quedó ahí y les trasladó que «también sepan que la gente está muy molesta, nosotros como representantes sindicales somos los portavoces de esas personas».
A este respecto, agregó que «estamos muy molestos porque no es posible que una garantía, un derecho que tenemos como servidores de la educación esté en peligro, o esté tambaleando, entonces sí me gustaría escuchar propuestas».
Lamentó que los representantes del Comité incluso plantearan el escenario de «si no se resuelve…» a lo cual les corrigió y exigió con voz firme que «se tiene que resolver porque no tiene porqué no resolverse, las aportaciones no se han suspendido, entonces por qué no podemos recibir una atención de calidad si nosotros no estamos incumpliendo».
Mientras, otro maestro más veterano pidió al Comité Ejecutivo Seccional acciones, que le digan a la base «qué se va a hacer, cómo se va a hacer, pero no en esta situación en la que estamos, yo creo que para algunos que hemos estado de cerca habría mucho que decir, Pensiones es una parte, pero hay tantas cosas que se han estado cediendo, han hecho lo que han querido con nosotros, la parte patronal, gubernamental, yo creo que ha habido pasividad del sindicato, con todo respeto al maestro Ever».
Sostuvo que ya bastaba de palabra y hacían falta más acciones, que la problemática era de sobras sabida por todos, preguntándose entonces para qué era necesario rellenar formatos o quejas, «para qué perder tiempo», «cuando no actúas la base te rebasa» o «hay muchas formas de hundir al trabajador, la pasividad es una forma, la omisión es otro», entre otras cuestiones.
