Avanza la solución al caso de la maestra Karla Alejandra Ramos, a tres años de que sufriera un accidente laboral en su escuela. Tras presentarse la pasada semana en el sindicato en ambulancia, postrada en una camilla y después de las gestiones ante la Secretaría de Educación y Deporte, esta mañana le hicieron entrega a su hija en la Sección 42 del SNTE de los 15 cheques correspondientes a un año y dos meses de salarios caídos. Sigue la exigencia del pago de las primas que le corresponden, el aguinaldo y el reconocimiento de su pensión por el 100 por ciento.
Su hija y la maestra Heredia fueron atendidas por el secretario general de la 42, Manuel Quiroz, la secretaria de Finanzas, Gabriela Domínguez Franco, el secretario particular, Raymundo Chacón Ortiz, y el secretario técnico, Roberto Medina Sánchez.
Ambas fueron citadas en las oficinas centrales de la Sección 42 después de que el viernes tras el cotejo por parte de los licenciados que les llevó de la 9 de la mañana a la 1 de la tarde, le fueran entregados a la representación sindical los quince cheques por el puro concepto de salarios caídos.
El profesor Quiroz destacó que éste era el primer paso, el reconocimiento del accidente laboral por las autoridades y la emisión de los cheques por los pagos pendientes. Apuntó que tras éste le sería reconocida a la maestra Karla la incapacidad permanente y su pensión, enfatizando que el sindicato gestionará que, como corresponde a los casos que hay un accidente laboral de por medio, sea por el 100 por ciento y no por el 65 por ciento que las autoridades ofrecieron a la maestra para zanjar el caso y ésta inicialmente aceptó cansada de la falta de soluciones.
El secretario general de la Sección 42 volvió a lamentar la existencia de dos o tres funcionarios de Pensiones Civiles del Estado que estarían entorpeciendo este tipo de casos, si bien reiteró que la demora y letanía habría sido ocasionada por funcionarios de la SEyD y en especial de la Coordinación Jurídica.
Al momento del cotejo de los cheques, la maestra Heredia, que durante todo este proceso apoyó y acompañó junto a otras compañeras a la maestra Karla Alejandra, advirtió que se trataba de los pagos de puros salarios caídos, y que faltaban los pagos correspondientes al aguinaldo y a las diferentes primas a las que tiene derecho la maestra.
Mientras, la hija agradeció la intermediación del sindicato y relató la desesperanza y cansancio por lo demorado del proceso que ha sufrido su mamá, dando origen a importantes deudas, ya que gastaban en su atención más de lo que ingresaban, por lo que buena parte del monto de estos salarios caídos irán destinados a saldar dichas deudas y préstamos.