Por: Punto…
Existe una mezcla de desconcierto y malestar entre parte del magisterio federalizado por algunas cuestiones que se habrían venido dando durante el proceso de Cambios de Adscripción. Y es que, aunque la convocatoria oficial de USICAMM lo impide con el famoso candado de los dos años de permanencia en el actual centro de trabajo, desde la estructura ilusionaron y alborotaron a algunos docentes de Preescolar y Primaria que no cumplían dicho requisitos, a los que vía llamada les dijeron que no importaba, pero a la hora de la verdad se las hicieron de humo, que siempre no y si te he visto no me acuerdo.
Desde hace semanas se han venido recabando testimonios al respecto y en lo general coinciden en cómo fue ocurriendo todo. Según estas informaciones, desde que se emitió la convocatoria de Cambios parda el ciclo 2023- 2024 diversos supervisores, no todos, empezaron a invitar a los docentes a su cargo que metieran su solicitud en la plataforma aunque no cumplieran con los dos años en su escuela.
Aunado a ello, refieron que recibieron llamadas por parte de los Enlaces de Planeación de Preescolar y Primaria de Servicios Educativos del Estado de Chihuahua -aclaran que nunca de parte de los titulares de las direcciones de ambos niveles- afirmando que sus aspiraciones de procesos de cambio seguían su curso con base a un presunto o supuesto acuerdo en lo oscurito entre la Secretaría de Educación y Deporte, SEECH y la Sección 8 del SNTE.
Acuerdo, por cierto, que desde la Octava negaron. Desde SEECH y SEyD no hubo ninguna respuesta. Si existía dicho acuerdo, obvio que no lo reconocerían públicamente porque lisa y llanamente violaría la convocatoria oficial. Esto debido a que no se estaría brindando igualdad de condiciones a otros docentes que no metieron su solicitud por no cumplir el requisito de los dos años y obligaría a reiniciar desde cero el proceso, habiendo ya publicadas listas de solicitudes aceptadas.
Lo cierto es que comentan, y son varios, que recibieron no una, sino diferentes llamadas de los enlaces de SEECH en ese tenor, alentando sus aspiraciones de acercarse a la zona deseada. Aseguran que todo cambió después de que una docente denunciara presuntos «corrimientos irregulares» de jefes de sector de Primaria sin dos años completos de permanencia en su actual adscripción.
Esa denuncia, apuntan, cambió el discurso en las llamadas ante el miedo a denuncias por cambios por fuera de lo estipulado en la convocatoria. Si bien son conscientes que desde el principio había algo que no cuadraba en todo esto y estaba claro que no cumplían con un requisito que, aunque polémico, discutivo y que se busca tumbar desde el SNTE a través del Congreso de la Unión, continúa vigente e hizo que muchos no metieran su solicitud, enfatizan que tampoco había ninguna necesidad de que desde la estructura y las autoridades se les alborotara y dierea esperanzas para terminar así.
También relacionado con el proceso de Cambios, manifestaron que hubo quienes detectaron en las listas de Secundarias Generales a dos compañeros que no cumplían los dos años -una por apenas un mes y otro por unos tres meses- y que finalmente fueron tumbados. Al menos, que se sepa, uno de ellos debido a una solicitud de transparencia de un compañero que advirtió la irregularidad.
Aquí el tema, refieren, es que de no haber existido esos pitazos o señalamientos esos procesos habrían seguido su curso a pesar de no cumplir con el famoso requisito. Entonces las preguntas que surgen son ¿y quién revisa esos temas? ¿a quiénes se les pasó que no cumplían con el requisito? o ¿quién los pasó por alto? ¿tendrían alguna influencia?
Dicho esto, si se advirtieron esos dos casos ¿quién puede decir que en las listas no haya algún que otro caso más en condiciones similares?
También causo ruido entre parte del magisterio federalizado chihuahuense el hecho de que se esté concediendo la posibilidad del cambio a maestros que se reubicaron en el mismo centro de trabajo en el que ya se encontraban. Esto, aseguran, debido a que hubo a otros a los que sus superiores les habrían dicho que se movieran donde quisieran porque ese primer año de todas formas no les iba a contar e iban a tener que pasar otros dos años en un mismo centro de trabajo para optar a cambio. Algunos afirman, que de haberlo sabido también se hubieran reubicado en su momento en su mismo centro de trabajo. Habría varios casos de este tipo en las listas, aseguran.
