Chihuahua, Chih.- Tanto el subsecretario de Educación Básica, Lorenzo Arturo Parga Amado, como la directora general de los SEECH, Sandra Elena Gutiérrez Fierro, coincidieron en que bajo ningún motivo un director puede condicionar o prohibir la participación de un alumno en la ceremonia de graduación de la escuela por el simple hecho de que no haya realizado la “aportación voluntaria” a la Sociedad de Padres, y advierten que de haber algún directivo que incurra en esta práctica será sancionado.
Cuestionada respecto a esta situación, la directora de los Servicios Educativos del Estado de Chihuahua manifestó categóricamente que “de ninguna manera un Directivo puede condicionar a ningún alumno a no participar en la ceremonia de Graduación, que dicho sea de paso es fiesta de los alumnos”. Advirtió que un comportamiento de este tipo “es merecedor a una sanción, habrá que valorar la dirección jurídica el caso en concreto para revisar a qué sanción es merecedor”.
Por su parte el subsecretario Parga cuestionado por la misma pregunta de si un directivo podía condicionar o prohibir la participación de un alumno en dichos festejos, también fue claro. Manifestó que “las ceremonias de clausura, las ceremonias de graduación, son un reconocimiento por el esfuerzo hecho, por el reconocimiento de los años que ha pasado tanto en preescolar, tanto en primaria, en secundaria, en preparatoria, con la intención de motivar al niño que sea una de muchas, que sea una constante poder festejarle sus pequeños triunfos”.
Es por ello que Parga hizo hincapié en que “consideramos abiertamente que de ninguna manera tiene que haber discriminación por una cuestión económica”. Ahondando en esta idea, el subsecretario de Educación Básica de Chihuahua apuntó que “cuando hablamos de la gratuidad que ofrece la educación, refiere precisamente a eso”.
Aseveró que los padres de familia entienden que la aportación voluntaria que ellos hacen a través de las Sociedades de Padres son muy importantes para el sostenimiento de las escuelas, “pero no para negar el servicio” y que no se le puede negar la educación “a un niño que no tenga el recurso para dar una cuota voluntaria, una cuota de inscripción o alguna aportación de la escuela, entonces esto sucede también en las ceremonias de graduación”.
De hecho, aseguró que en el supuesto de “si se organizan como papás en hacer una ceremonia en algún lugar que cuesta, tienen que buscar la manera de que aquel niño que no puede con esa parte poderlo apoyar para que pueda acudir porque tampoco podemos restringirlo, limitarlo a que no acuda a su ceremonia de graduación o ceremonia de fin de curso”.
Si pese a todo ello hubiera algún directivo que no siguiera las indicaciones y condicionara o exigiera el pago de la cuota voluntaria para permitir la participación del niño o el adolescente, advirtió que “hay sanciones administrativas”.
“Obviamente hay un código que regula el funcionamiento del maestro, el funcionamiento del directivo, el funcionamiento de un funcionario, y en este caso su autoridad inmediata superior, que sería el supervisor, es el que tiene con la denuncia del padre de familia, es el que le corresponde presentar ese informe, y desde luego se abre un proceso de investigación y una sanción administrativa para el directivo”, aseveró.
Recordó que en abril que dieron a conocer en el oficio 152/2022 las condiciones que solicitábamos para que se realizaran las ceremonias tanto de clausura como de graduación en las escuelas, la indicación “era precisamente que se considerara las cuestiones económicas, sociales, culturales, las condiciones que pudiera tener la escuela”.
De igual modo recordó que en dicho oficio, el 152/2022 también solicitaron que las ceremonias de final de curso y graduaciones se realizaran dentro de la escuela “para evitar gastos onerosos”, que fuera con el uniforme con la misma intención, “siempre va a ser más fácil bajar al de arriba que subir al de abajo”.
Enfatizó que “las escuelas son multiculturales, en las escuelas tenemos contextos de todo tipo, en todos lados se da y todos los salones tenemos niños que viven bien, que pueden tener los medios para hacer muchas cosas, pero también encontramos la otra parte lamentable de niños que muchas veces dependen incluso del mismo maestro”.
El profesor Parga aseguró que “si algo nos ha pedido la gobernadora, si algo nos ha pedido el secretario de Educación es precisamente que partamos de esos principios, que son igualdad y equidad”, añadiendo que la frase que utiliza la gobernadora de “Juntos sí podemos” “no es una ocurrencia, es precisamente sí podemos, juntos, pero no en la unicidad como uno, sino todos juntos, para uno”.
