Respecto al Proceso Electoral Sindical. Una opinión.

Por: Mtra. Rocío Carlos. Región Paquimé. SNTE 42

Es verdad compañeros maestros que hoy cómo nunca se nos antoja hacer un hoyo en la tierra y meternos ahí hasta que este evento pase. Pero, ya que pase, al salir, veremos así nada más, como aquellos, los que si resistieron (por interés, conveniencia o responsabilidad) habrán ayudado a alguien (alguna planilla) a lograr posicionarse; ellos, al ganar y empoderarse, empezarán a tomar y firmar decisiones por todos y para todos… no habrá mucho que hacer entonces…nada que refutar.

Tendremos nuevos representantes sindicales, un dirigente para corregir el rumbo o terminar de encaminarnos a la peor situación laboral/profesional jamás pensada. Si votamos o no votamos por esa opción, incluso, si nos abstuvimos de votar -metidos de cabeza en nuestro hoyo en la tierra- seremos todos por igual responsables de ese resultado, víctimas de nuevo y ahora victimarios.

Entonces quedará volver a decir: «se supone que están ahí para defender nuestros derechos» y solo esperar que así lo hagan, seguir quejándote, formal o informalmente, o simplemente aguantarte si no sucede, otra vez… «pero cuando andaban en campaña prometieron que … y ya se les olvidó» entonces seguirás sumando frustración e impotencia con algo de culpa a tus años de servicio, por no haber siquiera intentado sumarte a la lucha para que esta situación cambiara, a tiempo, (por ejemplo ahora con toda esa fuerza y esperanza de un cambio para el magisterio, no para la siguiente, porque ¿y si no hay una siguiente?) «Siempre es lo mismo», «Ya estaba arreglado desde arriba»… ¿No será que lo hacemos posible de solo pensarlo? Pero sobre todo al permanecer solo esperando, confiando a ciegas, dejándolo a la suerte, el azar, o cualquier otra forma que no es, por supuesto, una verdadera toma de decisión: informada, responsable y comprometida.

“Yo me preocupo por mi trabajo, lo sindical no me interesa”, tu trabajo maestro, ha sido y seguirá siendo afectado por las decisiones que se tomen en el plano de lo sindical, o en serio piensas que “patrón gobierno” aprecia, valora, conoce y reconoce ampliamente ese trabajo, por el que tanto te preocupas y empeñas, poniendo tantas veces y en tantos ámbitos “el extra”, pues los que tenemos algo más de tiempo en este ámbito sabemos que no, también sabemos que es necesario estar organizados como sindicato, elegir a nuestros representantes y pugnar constantemente por que nuestras conquistas laborales, así como las condiciones de trabajo sean las correspondientes al nivel de responsabilidad desempeñado. No es fácil. Patrón gobierno no va a pensar en nuestro gremio como prioridad. No antes, ni más, ni mejor que nosotros mismos.

No. No ha sido así, por eso es necesario que nuestra institución sindical permanezca, se renueve, fortalezca y retome con dignidad la esencia de servicio a la base magisterial a la cual se debe, pues no hay otra razón de ser para nuestro SNTE que la defensa de los derechos de los trabajadores de la educación. Ahora de manera abierta, universal, democrática, en pleno ejercicio de decisión responsable, con nuestro voto. Plural en la participación, con pleno respeto de lo institucional.

“¿Ya qué más podemos perder?”, de verdad queremos quedarnos así nomás y averiguarlo, porque ya los secretos a voces gritan las negociaciones “en lo obscurito” que ya se dejan entrever y nos demuestran que sí, que todavía tenemos mucho que perder y que viene a afectar directamente a nuestras familias, nuestro patrimonio, o te consuelas pensando que al menos podrás poner un negocito para poder sostenernos al jubilarnos, y el servicio médico? porque si ya hoy no cubre la mitad de las necesidades de mi familia, porque casi todos los meses tengo que comprar alguno de los medicamentos en mi receta, ¿y cuando sean todos? ¿y cuando no sea un paracetamol de 70 pesos, sino alguna otra de 2,500?, ¿Te alcanza para comprarla sin problemas quincenalmente?

“Podemos con eso todavía” quizá tú que alcanzaste tu L plus, ¿y los que no? ¿y los maestros de nuevo ingreso?… pero entonces muchos creyeron que de verdad no iba a pasar nada, porque cuando hicieron sus giras regionales en el 2015, muchos de esos que hoy se postulan, por cierto, y nos dijeron -y siguen diciendo- “no pasa nada” … “la Reforma Educativa no pasa”, y pasó, “la Reforma Educativa no afecta”, y afectó, sigue afectando, “lo que pasa es que no se armonizó a tiempo”, pues que conveniente, para unos y cuántas ganancias generó y sigue generando para otros, ¡si esos! esos mismos que andan -de asesores- de los que se están postulando, algunos de ellos que hoy tienen el descaro de decir que ello no, que nos juran ser diferentes, autónomos y salvadores de lo que entonces a nadie le interesó dejar perder.

Por eso es tan importante que no solo preguntemos, hay que investigar, comprobar, revisar historias de vida política/sindical. No solo levantar las manos, sino la voz y meternos hasta los codos: ¡Por que es lo nuestro lo que está en juego!

El octavo transitorio, nos sirvió de muy poco, a veces creo que quizá nos alcanzó el karma, por haber permitido que se creara esa “falsa categoría” de maestros noveles, para luego someterlos a esa condición tan injusta, tanto en percepciones como en prestaciones; o será que, si trabajan menos los maestros del 2015 hacia adelante que los de antes de esta fecha, ¿les tocaron menos responsabilidades? Tanto así fue la descarga de responsabilidades que el sueldo se equipara al de un repartidor de Sabritas(sin menospreciar a nadie, pero no es, y nunca será lo mismo cuidar comida chatarra que educar niños).

¿En prestaciones? ¡pues nos fuimos de calle! con la pérdida de prestaciones de nuestros maestros desde el 2015, cuántas hay que los noveles ya ni siquiera conocen, dicen que se perdieron con la nueva ley, cuando simple y descaradamente, se “canjearon”, por una serie de procesos amañados a los que debemos someternos todos sin claridad, sin garantía, ni continuidad, sin justicia, sin equidad, procesos que no son confiables ni transparentes. Mucho trabajo por hacer. Mucho y para todos, jubilados, activos, 2015…¡somos todos!

“Es que realmente a mi no me afecta en nada”. Sí. Si tu piensas así, tienes razón, no te afecta en nada, solo una cosa, no estorbes. Sonrie y mantente de buen humor si eres tan feliz en tu isla.

“El sindicato antes era una fuerza muy importante” el sindicato es una fuerza importante, aplacada por unos cuantos que se han perpetuado en el poder. El sindicato somos nosotros, todos los trabajadores, ellos son sólo los representantes, los que “premiamos por su buen desempeño o les demandamos el mismo”, los representantes sindicales, desde los de escuela hasta el Secretario Seccional (en el caso) fueron electos para cumplir una función, los ponemos y los podemos quitar si no va con los intereses y necesidades del sindicato, antes de que continúen permitiendo las barbaridades que en nuestro nombre negocian y firman… la negociación de prestaciones es un descaro “pero yo nunca acepté que me descontaran, o que me cambiaran de cuentas, porcentajes, claves, etc. “ si profe, incluso firmamos sí a la Reforma Laboral que tanto nos ha golpeado, (bueno algunos de esos locos, violentos, profes flojos de la CNTE no lo hicieron) firmamos, nuestros representantes legales, esos a quienes les entregamos nuestro presente y futuro laboral, tan ciega y confiadamente, firmaron sin tentarse la conciencia.

“Ahora no es diferente, nos va a volver a pasar lo mismo…” ¿Nos va a volver a pasar lo mismo?!! ¿de verdad?!! Quiero creer, creo con todas mis fuerzas que no pasará más. Pero depende de todos y cada uno de nosotros: trabajadores de la educación del sistema estatal.

Entonces compañeros si es importante. Es una decisión que tienes que pensar y repensar sobre bases firmes, información comprobable, argumentos válidos. No te cuesta nada o muy poco hacerlo y te costará tu vida laboral en delante, no hacerlo.

Es una decisión de conciencia personal y espíritu gremial, tienes que pensar en el futuro de nuestra profesión, cómo vamos a proteger a nuestros jubilados, a terminar los que estamos en activo y cual será la situación de los que vienen, si es mucho, al menos ve claramente el suelo que pisas y hacia donde vas, voltea a ver a los que dependen de tu estabilidad laboral: tu familia, hazlo por ellos.

No es una decisión fácil, como para centrarla en simpatía, compañerismo o amistad. Hay prioridades, se llaman: familia.

No es una decisión sencilla, como para decidir solo para no tener problemas en mi centro de trabajo, “que van a decir si voto -o no- por..” Hay prioridades, se llaman: tus condiciones de trabajo.

No es una decisión sin importancia, como para dejar que otros decidan por mi. Hay prioridades, se llama: el futuro del magisterio, mi futuro.

No es una decisión eludible, como para aprovechar ese día para ir a…., la prioridad es participar, porque va en juego lo que viene para ti, tu familia, tu escuela, tu región, para los maestros estatales de Chihuahua en los próximos años.

Hoy todavía puedo. ¿Qué hago?

Conocer mi situación laboral/profesional, analizar dentro de lo posible real, como podemos recuperar, recrear o crear nuevos y mejores sistemas (justos y dignos)…
Levantar la cabeza, empuñar, andar, participar en lo que sea que venga.

Defiende la oportunidad histórica que se te da de participar, permanece atento, defiende tu proceso electoral, di no a la guerra sucia entre planillas, escucha respetuosamente las propuestas, participa, opina, pregunta, se reflexivo, propositivo, involúcrate, permite y exige una votación transparente, no lo echemos a perder.

Por favor no lo echemos a perder. Es cuanto.