Exige #AbreMiEscuela al Consejo Estatal de Salud a no continuar «sirviendo a intereses ajenos al bienestar público” y dejar de utilizar a todos los niños “como rehenes (…) por la falta de condiciones en algunas escuelas

Chihuahua, Chih.- Como ya se adelantaba anoche, integrantes del movimiento #AbreMiEscuela Chihuahua hicieron entrega en Palacio de Gobierno de una carta dirigida a la gobernadora y al resto de miembros del Consejo Estatal de Salud exigiendo la reapertura “Inmediata, Segura, Voluntaria y Permanente de las escuelas”. Hoy dieron a conocer el contenido íntegro de dicha carta, en la que entre otras cosas califican el cierre de los planteles de “contradicción lógica, sanitaria y científica es evidente, y revela con absoluta claridad que la política de contención de la pandemia no responde a los objetivos que debería defender el Consejo de Salud”. Afirman que “la actual política de salud en Chihuahua es una simulación” y acusa a las autoridades de utilizar “a los niños como rehenes”. Denuncian que se apueste, sin un solo argumento de organismos de salud internacionales, por afectar a todos los niños por la falta de condiciones en algunas escuelas. Aseguran que “el Estado debe buscar que las niñas y niños gocen de equidad de oportunidades no dedicarse a igualar las afectaciones” y emplazan al Consejo Estatal de Salud que en su reunión de hoy “no continúe sirviendo a intereses ajenos al bienestar público” y que “el Gobierno del Estado comience a cumplir con su obligación constitucional” de por el interés superior de la niñez.

A continuación el contenido íntegro de la carta de #AbreMiEscuela a la gobernadora y el Consejo Estatal de Salud:

Desde hace varias semanas hemos buscando un acercamiento con el Consejo a fin de solicitar decisiones justas y coherentes con la evidencia científica en torno a la pandemia de Covid-19, y que deje de privarse a niñas, niños y adolescentes de sus derechos, particularmente a la educación.

Lamentamos la negativa que hemos recibido para ofrecer al Consejo en pleno nuestra postura para lograr un regreso inmediato, seguro y voluntario a clases, por lo que nos dirigimos por este medio a usted y cada uno de sus miembros para exponer nuestros argumentos en esta exigencia.

Está comprobado que las escuelas no son una actividad de riesgo de contagio, y que los efectos del Covid-19 en niños son mínimos. Esto es un hecho manifestado por la Organización Mundial de la Salud, la Organización Panamericana de la Salud, la UNICEF, y gobiernos de todo el mundo.

Ninguna de estas entidades ha recomendado la suspensión de clases como medida de control de la pandemia, de hecho la UNICEF ha sido enfática en señalar que lo primero que debe abrir y lo último que debe cerrare son precisamente las escuelas.

En Chihuahua, las actividades de mayor riesgo, aquellas que promueven el incremento de contagios, como conciertos, eventos masivos, eventos deportivos, casinos, bares, restaurantes y otros, permanecen abiertos, mientras las escuelas continúan con sus puertas cerradas.

La contradicción lógica, sanitaria y científica es evidente, y revela con absoluta claridad que la política de contención de la pandemia no responde a los objetivos que debería defender el Consejo de Salud.

El conjunto de evidencia con la que cuenta la comunidad médica a nivel mundial muestra que el grado de contagio es drásticamente inferior entre los niños, es decir, que lo contraen en una proporción mucho menor, y en los casos de enfermedad, la probabilidad de que presenten un cuadro grave de la enfermedad es del 0.04%.

Los distintos estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud para establecer el grado de impacto de la escuela presencial como sector de propagación del virus, demuestra que no es un factor sustantivo.

Esto nos lleva a considerar que la actual política de salud en Chihuahua es una simulación, donde se permiten las actividades de verdadero riesgo, mientras se cierra escuelas y se utilizan a los niños como rehenes, pasando por encima su derecho constitucional a la educación y olvidando las obligaciones que tiene el Estado con ellos.

Hemos sostenido reuniones con representantes del Gobierno del Estado del área de Salud y Educción, y en ningún momento hemos recibido un solo argumento válido para el cierre total de las escuelas.

Se ha usado como pretexto la falta de preparación de muchos planteles, pero resulta injustificada una medida de esta magnitud, que victimiza a la totalidad de los niños por la falta de condiciones en algunas escuelas.

El Estado debe buscar que las niñas y niños gocen de equidad de oportunidades no dedicarse a igualar las afectaciones.

Es pertinente decir que, en la mayoría de los países del mundo, incluyendo aquellos en vías de desarrollo, las clases presenciales continúan, con independencia de la vacunación y otras medidas adicionales.

Establecido nuestro malestar ante el actuar del Consejo, queremos recordarle los graves efectos que el cierre de las aulas está provocando en la niñez chihuahuense más allá del rezago académico de dos años. Profesionales de la salud mental, y la comunidad de padres de familia hemos advertido el incremento de casos de ansiedad, depresión, que han desembocado en suicidios, sólo en la última semana 3 jóvenes se han quitado la vida en el Estado.

La Secretaría de Salud a nivel federal ha indicado que durante esta pandemia se ha observado un número jamás alcanzado de suicidio en niñas, niños y adolescentes.

Según el INEGI la suspensión de clases presenciales ha resultado ya una deserción de más de 5 millones de niños en México, y el confinamiento asociado a esta realidad ha llevado la violencia doméstica a máximos históricos, donde las víctimas más frecuentes son niñas y adolescentes mujeres.

En resumen, el cierre de escuelas no sólo es ineficaz para proteger a la comunidad, y mucho menos a los menores, sino que genera perjuicios sociales y humanos mucho más profundos, señalados por la comunidad internacional.

Es inconcebible que el Consejo siga aplazando el regreso a clases cuando el Gobierno del Estado a través del Secretario de Educación señaló hace 2 semanas que hay más de 5000 planteles listos para operar de manera segura, con solo 300 planteles en malas condiciones, contando además con recursos reservados para su acondicionamiento.

El Gobierno debe asegurar el regreso a clases presencial inmediato, seguro, voluntario y permanente, reconocer la actividad escolar como prioritaria, respetar el derecho superior de las niñas, niños y adolescentes por encima de cualquier consideración política o económica.

Esperamos contar con su apoyo, para que el Consejo en el que participa no continúe sirviendo a intereses ajenos al bienestar público y para que el Gobierno del Estado comience a cumplir con su obligación constitucional de velar en todas sus decisiones y actuaciones por el interés superior de la niñez garantizando de manera plena sus derechos.

Atentamente

Movimiento #AbreMiEscuela y más de 2000 chihuahuenses que han firmado la Carta por la Apertura Inmediata, Segura, Voluntaria y Permanente de las escuelas.

Representantes:

Angélica Acosta

Marcela Carrasco

Marisa Menchaca

Ana Cristina Rodríguez

Consuelo Fernández