Juárez, Chih.- Después de hacer público ayer su caso denunciando haber sido “despedido injustificadamente” el pasado viernes como Inspector Escolar de la Zona 62 de Secundarias en Ciudad Juárez y haber sufrido anteriormente acoso laboral desde la Coordinación de Educación Zona Norte, el profesor Huitzilíhuitl Alejandro Zúñiga publicó hoy un nuevo escrito titulado “La carta a Santa”. En esta singular carta, el maestro expresa sus deseos de que se haga justicia, recuperar su trabajo, que la Secretaría de Educación y Deporte atienda las denuncias de acoso que desde hace tiempo había presentado, que se sancione a los responsables –ayer citaba expresamente al titular de la Coordinación de Educación Zona Norte, Bernardo Valdez Talamantes-, una Sección 42 del SNTE que verdaderamente se preocupe de la defensa del trabajador de la educación, así como la creación de un Reglamento Interno de la SEyD que evite que casos como el suyo se vuelvan a repetir.
A continuación la carta del profesor Huitzilíhuitl Alejandro Zúñiga:
«La carta a Santa
Sí por justicia, lograse salir avante del atropello por el cual estoy pasando por culpa de gestiones corruptas y autoritarias, sería fabuloso que el Gobierno del Estado de Chihuahua mediante la autoridad competente se encargaran de penalizar conforme a la norma a quien resulte responsable (cese, destitución del cargo, multa o lo que amerite), tanto de la parte ordenadora como de la parte ejecutora del proceso efectuado indebidamente contra mi persona, así mismo, se deberían hacer los procesos y trámites necesarios para que jamás se repita con ningún trabajador del Estado, de cualquier categoría de nombramiento que ostente, pues el abuso de autoridad no debe tener cabida en ningún Gobierno del Estado Mexicano. En la zona escolar a la que pertenecía, varios directores escolares me han declarado sentirse acosados laboralmente por personal perteneciente a la Coordinadora de Educación Zona Norte, eso no debería pasar. Y me he enterado gracias a este pequeño ejercicio en redes, sobre “más que pocos” casos de ignominia que se viven en la Región Norte, quizá me toco ser bastión esta vez.
Me encantaría:
Que el SNTE (especialmente la Sección 42) recobrara unión, fuerza, forma y fondo, porque (sin meter cuestiones políticas) es el primer frente común que los Trabajadores de la Educación tenemos, porque nos representan y es en teoría la esencia pura de dicha organización: la defensa del trabajador.
Recuperar mi trabajo, que se diera respuesta a los oficios que he enviado a la Secretaría de Educación y Deporte del Estado de Chihuahua, donde notifiqué en tiempo y forma sobre el acoso laboral y las presuntas irregularidades detectadas en la Región Norte, desde el inicio del Ciclo Escolar 2018-2019.
No perder la posibilidad de acceder a los procesos de promoción horizontal, acceder al proceso de beca comisión (que por cierto gané en 2016-2017 y Gobierno del Estado de Chihuahua me negó el acceso)
Recuperar íntegramente el apoyo para visitas escolares al que iba a acceder el 18 de marzo del presente, pero que, por el atropello descrito, me excluyeron de tal beneficio.
Una disculpa por escrito por parte de quien resulte responsable por todos los daños inherentes del proceso descrito y las afectaciones a mi familia.
Mantener íntegramente todas las prestaciones laborales inherentes de la función.
La creación formal de un Reglamento Interno de la Secretaría de Educación y Deporte del Estado de Chihuahua, ya que la ausencia de este ha permitido abusos de autoridad y acoso laboral como los presuntamente ejercidos contra mi persona desde agosto de 2018 y que culminaron con la situación descrita del 13 de marzo de 2020.
Sí, por el contrario, la legalidad, la normativa, la lógica y la razón fracasan, significa entonces que cualquier empleado de Gobierno con un cargo político temporal (sin descripción de puesto, ni responsabilidades, ni obligaciones debidamente definidas), desconocedor de las leyes, por lo tanto, violador de estas, con escaso cabello en su frente y la mano en la cintura, podrá entonces pisotear los derechos laborales de un trabajador de verdad, un trabajador por honorarios, trabajador temporal o por proyectos, cualquier trabajador (sindicalizado o no) que realmente ha luchado por su cargo y sustento familiar. Pero que un Coordinador de Educación (por decir algún cargo cualquiera), por el simple hecho de poder hacerlo y contar con los recursos suficientes, decide prescindir de los servicios de quien opera realmente el sistema. Entonces la educación, “la madre de todas las licenciaturas”, el sistema que garantiza el derecho humano más importante de todos: por permitir el acceso a los demás derechos y garantías; El Sistema Educativo estará tristemente secuestrado por palurdos, pelafustanes y corruptos. Ese será el día más triste de todos.”
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