Durante la tercera fase del programa “Rescate del Río Sacramento”, el alcalde Marco Bonilla centró su mensaje en la responsabilidad ciudadana para mantener limpia la ciudad. Señaló que, aunque el municipio continúa con operativos de saneamiento en ríos, arroyos y espacios públicos, estos esfuerzos serían innecesarios si la población evitara arrojar desechos.
El alcalde recordó que la limpieza de Chihuahua no depende solo del gobierno, sino de la conducta diaria de quienes la habitan. “Una ciudad limpia no es la que más se barre, sino la que menos se ensucia”, expresó al subrayar que los principales responsables de contaminar los cauces son los propios ciudadanos.
Bonilla añadió que la acumulación de basura obliga a destinar recursos y coordinar grandes operativos para rescatar espacios como el Río Sacramento, cuando el primer paso debería ser evitar ensuciar. Afirmó que el amor por la ciudad se demuestra con acciones simples, comenzando por no tirar residuos en la vía pública.
El alcalde reiteró que continuarán los trabajos de limpieza en distintos puntos, pero insistió en que la solución real requiere un cambio de hábitos para evitar que los ríos y arroyos vuelvan a deteriorarse.
