Encabezados Vicky Márquez, un pequeño grupo de productores de la colonia Ladrilleros Norte protestó este jueves en la Plaza Hidalgo para denunciar que la Junta Municipal de Agua y Saneamiento de Chihuahua, dirigida por Álan Falomir Sáenz, les está restringiendo el suministro de agua, impidiéndoles continuar con su actividad productiva. Incluso, señalaron que hace ocho días personal de la dependencia les confirmó que no se les mandaría agua “porque no era para trabajar”.
Con un tinaco vacío, ladrillos y una moldera colocados frente al Palacio de Gobierno, Márquez explicó que llevaron ese material “para que vean que sin agua no se puede procesar el ladrillo”. Recordó que ella dedicó muchos años a este oficio y que, aunque ahora presta sus terrenos para que otras familias trabajen, conoce bien las necesidades del sector. “Yo uso para mí el barro, yo no lo vendo; pero hay gente que vive de esto, no es posible que no le echen agua”, reclamó.
La representante acusó que la pipa de la JMAS acude “una quincena sí y otra no”, y que si la gobernadora indígena Reyna Durán no interviene, simplemente no les mandan el servicio. Añadió que la colonia carece de red de agua potable, pese a que se les habría prometido. “Tenemos más de 23 años ahí y jamás han ido ni a emparejar con una máquina”, dijo.
Otro de los reclamos expuestos es la presunta intención de quitarles lotes. Márquez señaló que en Ladrilleras la gobernadora indígena Reyna Durán “anda consiguiendo firmas” para dicho proyecto, lo que consideran una amenaza directa a su permanencia y a su actividad económica.
La líder informó que más pobladores están citados para sumarse a lo largo de la mañana y exigió al Gobierno del Estado abrir diálogo inmediato. Advirtió que, si no reciben una respuesta favorable, cerrarán calles como medida de presión. “No me da vergüenza ser ladrillera; es un trabajo respetable y honorable. Pero no es posible que nos quieran dejar sin agua”, concluyó.
