¡Si no me muevo, no escucho el ruido de mis cadenas!

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Por: Prof. Rafael Velázquez Hernández

Compañeras/os:

Como ustedes saben, a nivel nacional hay una efervescencia magisterial en la búsqueda de lograr una jubilación digna: Por años de servicio (28 mujeres y 30 hombres) y no por edad cronológica del trabajador; erradicar las AFORES de nuestro sistema pensionario; lograr que el tope máximo de la pensión se calcule con base en Salarios Mínimos y no en UMA´s (como está hasta ahora). En pocas palabras ¡ABROGACIÓN INMEDIATA DE LA LEY DEL ISSSTE DEL 2007!

¡Imagínense, trabajar mínimo hasta los 60 años, en el mejor de los casos, porque algunos estarán orillados a morir en activo porque su miseria de pensión no les garantizaría una vida, en el ocaso de la misma, lejos de la precariedad!

En días pasados un compañero maestro de Casas Grandes comentó: “Sí tenemos miedo a un descuento por luchar, entonces sí nos merecemos pensiones de hambre”

En ese sentido, en el estado de Chihuahua hemos abrazado la búsqueda de un futuro menos desolador, diferente al que se vislumbra en estos momentos, producto de las políticas económicas neoliberales. Hoy en día, hay docentes que se quejan y quisieran regresar el tiempo al 2007 para luchar o migrar a los “beneficios” del “décimo transitorio”, porque ya con la cabeza fría y con calculadora en mano, se están dando cuenta que las pensiones individualizadas concentradas en las AFORES, no les augura una vejez plena.

Hay un llamado a la lucha, ¡ACUDÁMOS GUSTOSOS!, sabedores que en las calles también enseñamos, que predicamos con el ejemplo, que el decirle a nuestros estudiantes: ¡defiende tus derechos! No únicamente sale de nuestras bocas, sino también de nuestras acciones. El magisterio, como la mayoría de las veces, piensa en sus estudiantes antes que en él mismo, pero ahora es tiempo de poner a esos mismos estudiantes con un maestro de más de 60 años, ¿se lo merecerán?

Ya lo sentenciaba el profesor Luis Beltrán Prieto Figueroa: “Hay quienes quieren un magisterio sumiso, arrinconado, incapaz de levantar la voz; pero un pueblo que tenga maestros de esa categoría tendrá que ser un pueblo de esclavos”.

¡PORQUE LA LUCHA ES JUSTA, QUE LA VICTORIA SEA DE TODOS!

¡VIVA EL PARO MAGISTERIAL, ARMA LÉGITIMA DE LOS TRABAJADORES!