En el marco conmemorativo del Día del Maestro, la docente María Romero Tapia se dirigió al cuerpo magisterial para brindar un mensaje de amor a su profesión como ganadora del premio al mérito docente María Esther Orozco Orozco, el cual se entrega a nivel municipal.
Romero Tapia hizo un llamado a todos sus compañeros maestros a llevar la educación más allá de solo entregar los contenidos, creando una formación integral de acuerdo con las necesidades de todos sus alumnos.
Destacó varias historias que le han tocado vivir a lo largo de su carrera como maestra de educación especial, mencionando cómo comprender el contexto de los niños ha ayudado a que estos pudieran llevar de una manera más amena no solo su escolaridad diaria, sino también su día a día.
Subrayó que esto impacta fuertemente en la vida de sus alumnos, especialmente si se trata de niños y jóvenes.
«No solo es necesario sentarme frente al niño a enseñar las letras o números. Mi trabajo como maestra de educación especial siempre será ver más allá, conocer sus necesidades, su contexto, su familia, y saber si simplemente necesita un abrazo o alguien que lo contenga. Pareciera muy romántico esto que hoy les cuento, pero mi mensaje el día de hoy es este: mira como docentes de impactar en la vida de nuestros alumnos no solo enseñando lo que el currículum nos marca sino dejando en ellos eso que los impulse a ser mejores personas, niños felices en su momento y jóvenes con un sentido de vida. El aprendizaje, las letras, los números vendrán por añadidura.»
Por lo cual, hizo un llamado a todos los docentes a seguir generando el cambio en la sociedad desde sus trincheras, cambiando poco a poco el mundo desde las aulas escolares, recordando que muchas veces la escuela y sus maestros suelen ser los lugares seguros para estudiantes que se encuentran en situaciones difíciles.
«Seguir invitando a todos mis compañeros de todos los niveles aquí presentes y docentes en general a seguir siendo agentes de cambio desde donde nos toca estar, adentro de nuestras aulas. Es el trabajo más valioso que tenemos y muchas veces somos nosotros el lugar más seguro que tienen nuestros alumnos.»