Algo se está cocinando en la Junta Municipal de Agua y Saneamiento de Chihuahua. Y es que aparte de la inversión en infraestructura hídrica y abatimiento de las fugas, aseguran que estarían trabajando en una novedosa aplicación móvil para impulsar el uso responsable del agua en la capital del Estado y que pequeños y grandes puedan contribuir a ello jugando y, por si fuera poco, con ello acceder a algunos beneficios.
A estas alturas el cambio climático es innegable. Sin ir más lejos, el lunes el Dr. René Lobato Sánchez, del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, señaló en Chihuahua que el incremento de las temperaturas de unos años a la fecha es del orden de los tres o cuatro grados centígrados.
Las elevadas temperaturas registradas este verano, se habla ya de fenómeno de “ebullición global”, y el aumento aparejado de demanda de agua, movió a la JMAS encabezada por Álan Falomir -que cada verano tiene que hacer auténticos malabares para que falte el menos agua posible- se pusiera manos a la obra en idear una nueva estrategia para fomentar la cultura del cuidado del agua.
De por sí sólo una estrategia enfocada en este propósito no sería novedad. Cada administración anuncia la suya, pero los resultados en la mayoría de los casos brillan por su ausencia. Y dicen que precisamente partiendo de la base de que los viejos métodos no sirven, la JMAS habría pensado en una estrategia articulada a través de algo tan en boga como las aplicaciones celulares, que busca ser un plan que trascienda administraciones y que implique tanto al sector productivo como a la ciudadanía, que consumen el 17 y el 83 por ciento del agua en la capital del Estado, respectivamente.
Aseguran que la App de la JMAS estaría ya casi lista, que los usuarios, niños y adultos, deberán llenar un formulario para crear su perfil, que la inteligencia artificial los ubicará por segmentos de la sociedad y habrá una serie de acciones de cuidado del agua que generarán una puntuación, por ejemplo, reportar fugas, reportar a vecinos que laven el carro con manguera o rieguen las plantas fuera de horario (entre las 7 de la tarde y las 7 de la mañana),… Acciones que además conllevan una considerable sanción vía recibo para quienes las cometen.
Habrá cinco niveles, de básico hasta diamante, y el que llegue al top será acreedor de una serie de beneficios en empresas en forma de insumos, cortesías,… como motivación para que la gente participe. Hasta el momento, la iniciativa, que ya fue socializada entre el sector productivo de la capital, habría tenido una gran respuesta en la iniciativa privada y ya se contaría con una importante cantidad de patrocinadores.
Y es que los informantes señalaron que la apuesta será atractiva para las dos partes, ya que las empresas participantes, además de obtener publicidad, podrán aspirar a recibir un distintivo como empresa hídricamente responsable si además reducen su consumo de agua, además de que la aportación que realicen será deducible.
La meta sería ambiciosa y pasa porque al menos la mitad de los habitantes de la capital descarguen la App, que familias enteras se animen a hacer un uso responsable del agua y a cuidar el vital líquido jugando y obteniendo beneficios. En el fondo el gran objetivo, el cambio de hábitos. Como apuesta suena diferente, atractiva,… y además no hay que olvidar lo ocurrido no hace tanto en el vecino estado de Nuevo León. Sólo falta esperar a la presentación oficial con todos los detalles para ver los alcances y qué tan atractivos son los beneficios para los más aplicados y, lo más importante, la respuesta de los chihuahuenses para ver si funciona o pasa a la historia como otra infructuosa estrategia más.