La gobernadora del estado de Chihuahua, Maru Campos, declaró oficialmente un estado de emergencia por sequía, señalando que la situación hídrica continúa siendo crítica y prevé un panorama desafiante para el próximo año. Además, anunció que para el 2025 el objetivo es llegar a los $1000 millones en cuanto a proyectos de infraestructura hídrica, apoyos alimentarios, ayuda a productores agropecuarios, empleos temporales, caminos rurales,….
“Estamos atravesando tiempos complicados en materia hídrica”, afirmó la gobernadora, advirtiendo sobre la necesidad de medidas efectivas y el apoyo de la ciudadanía para enfrentar esta emergencia.
Campos destacó el impacto del cambio climático en el estado, con el incremento global de temperaturas y la disminución de precipitaciones en el territorio chihuahuense, lo cual ha exigido un consumo de agua cada vez mayor. Además, mencionó el impacto del fenómeno de La Niña, que podría prolongar la baja en las lluvias hasta el año 2025.
La administración estatal ha duplicado año tras año su inversión en recursos para contrarrestar los efectos de la sequía. La gobernadora anunció que para el 2023 se destinaron $220 millones de pesos y, en respuesta a la gravedad de la situación, este año se alcanzará una inversión de $600 millones de pesos. Para el 2025, el objetivo es llegar a los $1000 millones en proyectos de infraestructura hídrica, en colaboración con la Secretaría de Desarrollo Rural, el DIF estatal, y la Secretaría de Desarrollo Humano y Bien Común.
Campos instó a la población a adoptar un consumo responsable del agua y a adaptarse a las nuevas realidades ambientales. Destacó que los ciudadanos, especialmente los agricultores, contarán con el apoyo del gobierno en la adaptación de técnicas de riego más sostenibles. La gobernadora subrayó que el gobierno está comprometido a responder de manera oportuna a esta situación y a proteger a las comunidades rurales que dependen de las cosechas, asegurando que no están solas en esta crisis.
“Lo más sabio que sabemos hacer como sociedad y como instituciones es adaptarnos”, concluyó Campos, reafirmando el compromiso estatal para enfrentar juntos los retos que plantea la sequía prolongada en Chihuahua.