Tras ser aludida en diversas ocasiones durante la videoentrevista en la que la maestra Rita Patricia Molinar Caraveo, directora de la Maestros Mexicanos 8422, habló de su exoneración por los señalamientos en su contra, la maestra Perla Briselda Cordero decidió contestarle. La maestra Cordero negó categóricamente todos los hechos y acciones que la citada le atribuyó, hizo hincapié en que durante su periodo como encargada de dirección de la escuela siempre actuó de forma institucional y respetuosa con el colectivo de docentes y trabajadores, y acusa a la maestra Molinar de incurrir «actos de violencia psicológica, injurias y malos tratos contra mi persona».
A continuación la contestación íntegra:
«Soy Perla Briselda Cordero:
De entrada, niego categóricamente todo lo dicho en mi contra. La razón de este derecho de réplica es en respuesta a la solidaridad que me han expresado varias personas, a quienes les debo haberme enterado de dicha publicación y su preocupación por mi vida.
En dicha video-entrevista, difundida en la red de internet desde el pasado martes 15 de octubre de 2024, se me acusa falazmente de estar aliada con el supervisor Armando Navarrete para afectar a Rita Patricia Molinar Caraveo, quien se dice “perseguida” desde hace siete años por las autoridades educativas y de haber sido puesta a disposición por las propias autoridades debido a diversos motivos y circunstancias; solo refiere a diferencias en las maneras de pensar entre ella y sus jefes; situación ajena al punto expreso en ésta réplica.
En la entrevista, Rita Patricia Molinar Caraveo, menciona haber sido afectada por el supervisor, Armando Navarrete, y alude a mi persona, el de estar “aliada” con él para perjudicarla, pese a que el profesor en su calidad de supervisor, en él poco tiempo que trabajé con él, siempre se condujo institucionalmente y privilegió un ambiente de respeto, y solicitó que evitáramos los chismes y conflictos entre compañeros.
Rita Patricia Molinar Caraveo, actualmente directora de la Preparatoria 8422 Maestros Mexicanos Sur de turno vespertino de la ciudad de Chihuahua, ha puesto en burla y ridiculizado el acta administrativa de amonestación que le fue expedida el día 6 de mayo de 2022 por incurrir en conductas que alteraban la convivencia y armonía en el plantel.
El acta se le entregó cuando yo, Perla Cordero, me encontraba con el encargo temporal de la dirección en dicho centro escolar. La amonestación se fundamentó en lo dispuesto en el Art. 108 del Código Administrativo del Estado de Chihuahua, Fracción VI donde se señala que se incurre en falta a esa reglamentación:
“Cuando el trabajador incurriere en faltas de probidad u honradez o en actos de violencia, amagos, injurias y malos tratamientos contra sus jefes o compañeros o contra los familiares de unos u otros, ya sea dentro o fuera de las horas de servicio…”.
Durante mi gestión se le expidió una sola acta administrativa y sin intención alguna de causar daño, sino de fomentar una convivencia respetuosa. La mayoría de mis colegas consideran este tipo de documento como una retroalimentación para mejorar su trabajo.
Es contradictorio que le cause risa un acta y, al mismo tiempo, diga que la desconcentra.
Afirma que el acta administrativa que se le expidió fue para desconcentrarla de un examen que presentaría al día siguiente. No teniendo la suscrita, conocimiento de dicho examen, lo cual corresponde a su vida personal y privada.
Rita Patricia Molinar Caraveo ha incurrido específicamente en actos de violencia psicológica, injurias y malos tratos contra mi persona, incluyendo el acusarme falsamente de inducir a una compañera para presentar una queja de índole sexual.
Considero que las personas tenemos la capacidad intelectual para actuar por motu propio, lo cual merece todo mi respeto, solidaridad y discreción con quienes sufren. Asunto previamente aclarado en una publicación en este mismo medio de comunicación.
Afirma Rita Patricia Molinar Caraveo que, durante su etapa como subdirectora académica, se sentía “rezagada”; que si la veía con compañeros, me plantaba a un lado de ella y les indicaba que se retiraran, lo cual es FALSO. Mi relación con ella y el colectivo, fue siempre de manera institucional y, sin embargo, mi trabajo fue descalificado de forma constante.
Respecto a que Armando Navarrete y yo “causamos terror”, aclaro que no se puede causar tal cosa al trabajar conforme a lo autorizado, especialmente bajo circunstancias adversas, ya que siempre es en claro cumplimiento a la normativa y nuestras propias obligaciones del encargo, llámense estos, administrativos y/o laborales.
Personalmente, no considero correcto hablar negativamente de nadie, sobre todo si eso significa lastimar y trasgredir la salud mental de los demás; creo en la bondad de las personas.
Sin embargo, he enfrentado constantes calumnias de parte de Rita Patricia Molinar Caraveo. Trascendió externamente entre personas ajenas a la escuela sobre la gestión que están llevando en mi contra.
Ante ello puedo comentar que esa estrategia se ha registrado en muchas ocasiones en algunas escuelas; que ese proceder lo hacen sin reflexionar, olvidando los valores, y lo explican como si estuvieran bajo una obediencia ciega hacia un líder. En opinión de expertos, lo anterior, lo señalan como acusaciones con fines políticos.
Finalmente decir que, he dejado atrás mi experiencia en esa escuela, y de esa misma manera, les deseo éxito tanto a Rita Patricia Molinar Caraveo, como al colectivo general de la Preparatoria 8422 Maestros Mexicanos, turno vespertino.
Agradezco la oportunidad de ejercer mi derecho de réplica. Muchas gracias por sus atenciones.»