La gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, ha denunciado los recientes despidos de más de 100 trabajadores de la salud en el IMSS-Bienestar como un acto de extorsión hacia los gobiernos del Partido Acción Nacional (PAN).
«Creo que esta medida fue definitivamente una forma de extorsión hacia los gobiernos del PAN, para que nos uniéramos al IMSS-Bienestar. Sin embargo, el gobierno del estado sigue apoyando a esta dependencia mediante los convenios que tenemos con ellos», declaró Campos.
Los despidos, que afectan a especialistas, médicos generales, enfermeros y nutriólogos, fueron anunciados en una reunión privada a la que no se permitió el acceso a los medios de comunicación. Los trabajadores despedidos formaban parte del Programa E023.
Campos expresó que estarían dispuestos a unirse al IMSS-Bienestar si funcionara adecuadamente, pero afirmó que en la práctica, los gobiernos estatales colaboran más con esta institución federal que al revés.
«Planeo hablar con Zoe Robledo sobre este tema. Mis colegas gobernadores del PAN también están preocupados por esta situación. Creo que es una táctica de extorsión hacia los gobiernos de Acción Nacional para que nos adhiramos al IMSS-Bienestar», enfatizó Campos Galván.
Uno de los trabajadores despedidos, con años de servicio, reveló que los representantes federales les informaron que habían perdido sus vacaciones acumuladas durante su tiempo en el trabajo. Como alternativa, se les ofreció la opción de trasladarse a otro estado para seguir trabajando.
