Darán mañana el último adiós al profesor Carlos Luis Miramontes Ávila, exlíder de la Sección 42; Recuerdan su trayectoria, trabajo y legado

Mañana jueves 18 de enero, amigos y familiares despedirán y darán el último adiós al profesor Carlos Luis Miramontes Ávila, fallecido el pasado 4 de enero, a los 64 años de edad, en Los Ángeles, California, y en la Sección 42 del SNTE, de la que fue secretario general, le harán un homenaje póstumo (mañana a las 10 horas en el auditorio de la Sección). Con motivo de su partida, allegados al profesor Miramontes quisieron recordar su figura, su trayectoria y el legado que deja.

Carlos Luis Miramontes Ávila nació el 25 de febrero de 1959 en el Municipio de Cusihuiriachi, siendo el mayor de 8 hermanos, si bien se crio y creció en Cuauhtémoc. Su padre, también de nombre Carlos, era maestro y su madre, Gloria María, ama de casa. Siempre estuvo al lado de su padre, creció entre docentes y siguió los pasos de su padre. Estudió para a ello en el Estado de Durango y posteriormente la Licenciatura en Ciencias Sociales en la ciudad de Chihuahua.

El profesor Carlos Luis Miramontes Ávila inició su labor docente en la comunidad de Tutuaca, en el Municipio de Gran Morelos. Posteriormente se cambió a La Capilla, en el Municipio de Cusihuiriachi, de ahí a la comunidad de Álvaro Obregón, en Cuauhtémoc, y más adelante a la Secundaria Sertoma, también en Cuauhtémoc.

Miramontes Ávila compaginaba su labor docente con la actividad política en el Municipio de Cuauhtémoc, del que llegó a ser secretario del Ayuntamiento en la Administración 1989-1992, presidida por Efrén Roberto Romo Chacón.

Fue electo secretario general de la Delegación D-II-33 y posteriormente se desempeñaría como coordinador regional de la Sección 42 en la amplia región noroeste.

Más tarde, se integró al Comité Seccional encabezado por el maestro Gerónimo Lara Jaramillo con la responsabilidad de la Casa del Maestro.

En el siguiente Comité Seccional, con el profesor Jesús Aguilar Bueno como secretario General, Miramontes fue electo secretario de Organización. «Su capacidad, entrega, resultados y el trato con sus colegas le dio la oportunidad de ser tomado en cuenta para ocupar la Secretaría General de la Sección 42, misma que el congreso le dio la confianza y desempeño el cargo del 2000-2004», señalaron cercanos.

Apuntaron que durante su periodo al frente del sindicato del magisterio estatal Miramontes Ávila tuvo la oportunidad de hacer «muchas acciones para preservar las prestaciones existentes, sostener bajo exigencias la calidad de Pensiones Civiles del Estado, crear nuevas prestaciones, consolidar la unidad del gremio, ofertar trato digno a los agremiados, reconstruir la relación del comité con el colectivo de exsecretarios generales de la misma, entre muchas otras».

Entre ellas, algunos agremiados contactados empezaron recordando la demanda del tiempo completo. «Estas acciones sindicales las llevó a cabo con el apoyo de su esposa Juanita, quien lo acompañó siempre en esta tarea conformando un equipo de mujeres en apoyo a la gestión». Aseguraron que «sus hijos, sin ser trabajadores de la educación, crecieron como uno más de la familia magisterial, hoy siendo ya unos profesionistas: Juan Carlos, Iván Alexis y Víctor Hugo».

En materia de infraestructura, señalaron que el profesor Luis Carlos Miramontes dio continuidad a la obra de los comités anteriores e hizo la inversión necesaria «para dar vida» al centro recreativo de la Sección 42. Afirmaron que fue durante su gestión cuando se puso en operación la alberca del complejo, los cuartos de ráquetbol, se construyó la palapa, se reforestó y se rehabilitación el recreativo en general.

De igual forma, recordaron que fue en la gestión del comité dirigido por Miramontes que se llevó a cabo la modernización del edificio sindical de la Sección 42 de la Cortez de Monroy y Deza y Ulloa, al diseño que tiene hasta la actualidad. En esa actuación se realizó la construcción de la sala de juntas, que recibió el nombre de «Exsecretarios», y también se acometió la remodelación del emblemático auditorio de la 42.

Continuando en materia de infraestructura, desde la frontera recordaron que fue durante su mandato cuando se construyó la primera parte del edificio sindical de la Región Norte, con cabecera en Ciudad Juárez, obra dirigida por un comité proconstrucción, atendiendo una sentida exigencia por años de los agremiados. Además, entregó a la delegación de jubilados de aquella región el antiguo edificio sindical para sus actividades.

En la Región Noroeste se hicieron inversiones para consolidar la construcción del edificio y salón de actos para la coordinación. También hay quien menciona la inversión en Camargo para las delegaciones de aquel rumbo, que se le dio seguimiento al edificio de Delicias, se creó la Región Paquimé de manera provisional otorgando validez y funcionamiento inmediato para el mejor servicio.

En el aspecto político partidista, algunas fuentes consultadas refirieron que «El funcionamiento de los diferentes órganos de gobierno sindical para la atención al tema político partidista fue de gran apoyo para quienes deseaban participar de acuerdo a a sus simpatías y afinidades, siempre ofreciendo respeto al estatuto» y que producto de ello se lograron posiciones en diferentes municipios.

Mientras, en el ámbito político sindical, recordaron que junto con la hermana Sección 8 se organizó y llevó a cabo el Congreso Nacional del SNTE en el que fue electo como secretario general el profesor Rafael Ochoa Guzmán.

Aseguraron que Carlos Luis Miramontes Ávila promovió el estudio estatutario y la cercanía con la estructura estatal de la Sección. Asimismo, recordaron que «las convivencias deportivas y culturales de los agremiados se recuerdan como una fiesta estatal anual donde se promovía la unidad entre los agremiados».

En cuanto a la grilla, refirieron que «el acercamiento con grupos que disentían o pensaban diferente permitió el tránsito de la gestión sin sobresaltos». En este sentido, otros actores cercanos destacaron que «La capacidad de diálogo y el trato de Miramontes permitió un comité unido y consolidó el liderazgo necesario en cada región para poder expresar que fue una gestión limpia y sin problemática que provocara el disturbio entre los grupos o tribus al interior de toda organización». Asimismo, reportaron la existencia de una buena relación con la dirigencia nacional con base a la institucionalidad durante dicho periodo.

Al hablar de prestaciones, quienes se comunicaron coincidieron en que «siempre se recordará el reconocimiento abierto a cada uno de los integrantes de su comité por su capacidad y ofreció su confianza al permitirles tomar decisiones con responsabilidad». Es por ello que consideraron que se dio un «avance significativo em materia laboral y prestacional».

Afirmaron que bajo la dirigencia de Miramontes Ávila se dio una «defensa férrea a las prestaciones existentes». En este sentido, apuntaron de manera respetuosa, exigió la mejora en la cobertura del servicio médico de Pensiones Civiles del Estado y se consiguió «la casi erradicación» de medicamentos genéricos. Recordaron que para ello incluso «envió una comisión a la revisión de los laboratorios que surtían medicamento en aquel entonces a nuestro Instituto de Seguridad Social». Aunado a ello, destacaron su exigencia puntual de la responsabilidad del área de medicina del trabajo y el cumplimiento por parte de Gobierno a los dictámenes emitidos por esa área de PCE.

En otro orden de cosas, señalaron que durante su mandato se lograron apoyos importantes para los jubilados «de manera gradual y periódica en cada negociación». Recordaron «que la primer gestión anual fue grande en cantidad económica para actividades de los jubilados», y apuntaron que recuerdan aún «la acertada decisión de dividirlo entre los beneficiados y entregarlo vía nómina a cada uno de ellos por partes iguales».

Otros allegados trajeron a la memoria que el profesor Miramontes se dedicó a conquistar la consolidación del reconocimiento del Segundo Escalafón Horizontal y ante la negativa del Gobierno logró la firma y autorización para el nuevo estímulo llamado «Estímulo a la Permanencia» para utilizar los recursos que se podrían haber utilizado para el Segundo Escalafón.

Refirieron también que «muchos deberán recordar aquella escena donde se observaba los ademanes (de Miramontes) al dialogar con el gobernador Patricio Martínez en pleno evento central del Día del Maestro. Se apreciaba muy amena plática y en realidad discutían por el tema de las prestaciones, dos hombres de carácter reacio y seguros de sí, de ese tipo de acciones con un gobernador que se recuerda amigo del magisterio, a cuando llega el momento de dejar la dirigencia, en el mismo lugar y mismo presidium el sr. Gobernador mando traer un piano y al tenor chihuahuense Ordóñez para dedicarle la golondrinas y reconocerle su gestión y transparencia».

Al finalizar su gestión al frente de la Sección 42, en el Congreso Nacional realizado en Tonatico, Estado de México, en el 2004, el profesor Miramontes Ávila fue electo como integrante del CEN en el Colegiado de Organización, del que también era integrante por ese entonces el hoy dirigente nacional del SNTE, el maestro Alfonso Cepeda Salas.

A la mitad de la gestión, Miramontes decidió retirarse del encargo nacional por motivos familiares y fue enviado de vuelta a Chihuahua como presidente colegiado de la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (FEDDESP).

En lo político, recordaron que coordinó diferentes campañas y acciones políticas «siempre institucional a su Sección 42» y fue coordinador de Finanzas del Partido Nueva Alianza.

Amigos de lucha aseguraron que «es recordado por propios y extraños como uno de los más respetuosos y mejores exsecretarios de la gloriosa Sección 42. No opinó a menos que se le consultara, no hizo grupos, no participó en ningún movimiento que atentara contra la dirigencia del momento y menos contra la institucionalidad de nuestra trinchera de lucha».

En paz descanse Profr. Carlos Luis Miramontes Ávila