Chihuahua, Chih.-César Jáuregui Moreno, fiscal general del estado, enfatizó la gravedad del problema de tráfico de personas en Chihuahua, señalando que este delito se ha convertido en el principal soporte financiero para los grupos delictivos de la región.
El fiscal indicó que casi la mitad de los homicidios en el estado están vinculados, directa o indirectamente, a la pugna entre grupos criminales por el control del tráfico de drogas. Pero más alarmante aún es la relación directa de este crimen con el tráfico de personas. Moreno citó que, según estimaciones, las ganancias mensuales obtenidas por el tráfico de personas en Ciudad Juárez ascienden a unos 100 millones de dólares.
“El tráfico de personas otorga a los grupos criminales la capacidad logística de adquirir armas, mantener casas de seguridad y estructuras operativas eficientes”, señaló Jáuregui Moreno.
El fiscal también mencionó el aumento en el número de secuestros, particularmente de migrantes, lo que está exacerbando la crisis de seguridad en la región y en el país, y destacó Ciudad Juárez como un punto crítico en esta problemática.
Además, Jáuregui Moreno criticó la política migratoria del país, sugiriendo que es demasiado permisiva y facilita indirectamente la financiación de grupos criminales al «proveerles mercancía». Reiteró que abordar la problemática del tráfico de personas y la política migratoria del país es esencial para enfrentar el problema de seguridad en Chihuahua.
El fiscal concluyó mencionando casos concretos de indocumentados involucrados en delitos graves, incluyendo el reciente asesinato de un agente de la policía estatal de investigación en Ciudad Juárez, en el que uno de los agresores era de origen salvadoreño.