Por: Mtra. Patricia Guadalupe Cruz Fuentes
Quienes nos reunimos en la plaza del Ángel este sábado 9 de septiembre, lo hicimos por nuestra propia voluntad, sin ningún interés partidista, nuestro objetivo principal, el rechazo a los libros de texto cuyo contenido no se dio a conocer en tiempo y forma para su análisis previo a la impresión. Por lo que unimos las voces para exigir libros de texto con calidad, objetividad y enfocado a la lectoescritura, las matemáticas, la filosofía la ciencia y la tecnología.
Miles de personas llegaron a la Plaza del Ángel y sus alrededores y presidieron la concentración representantes de organizaciones y asociaciones civiles, así como la asociación de padres de familia. Fue muy emotivo escuchar las miles de voces entonando nuestro glorioso Himno Nacional.
Mexicanos al grito de guerra el acero aprestad y el bridón, si bien es cierto que la idea principal de la concentración no era con la finalidad de inducir a la comunidad chihuahuense a levantarse en armas para la defensa del derecho de niños, niñas y adolescentes a recibir un libro de texto con calidad, lejos de adoctrinamientos y contenidos hipersexualizados. La consigna si era levantar la voz y hacer uso de nuestro derecho de libertad de expresión de manera pacífica, y con voz enérgica exigir libros de texto libres.
Un libro de texto debe nutrirse de contenidos temáticos que provean al Niño, niña y adolescente, de herramientas intelectuales, que lo ayuden a desarrollarse en el campo de la ciencia.
Aprender a ser, aprender a pensar, aprender a aprender, aprender a comunicarse y aprender crear e Innovar. A nuestros hijos o nietos no tenemos por qué obligarlos a que piensen y actúen como adultos, restándoles su derecho de aprender y vivir de acuerdo a su edad.
Los niños, niñas y adolescentes ya tendrán tiempo en su edad adulta de adoptar su propia creencia o ideología, mientras tanto que disfruten la época más bella del ser humano, la niñez y adolescencia, cuya única obligación es estudiar y prepararse para su futuro. Es obligación de nuestras autoridades entregar libros gratuitos con información clara, y precisa, respetando las reglas gramaticales, la sintaxis y la semántica, amén de una excelente ortografía y sobre todo contenidos temáticos enfocados en los saberes y pensamiento científico, apegados a los planes y programas vigentes.
A nuestros niños. Niñas y adolescentes que son el futuro del país, se les debe inculcar que solo con preparación académica de excelencia podrán aspirar a un mundo mejor, en primer lugar a una calidad de vida estable y en segundo lugar no menos importante a ser útiles a su patria en los diversos campos de la ciencia. A nuestros niños, niñas y adolescentes no debemos enseñarlos a dividir su escuela entre ricos o pobres, chairos o fifís. Se debe fomentar en los libros de texto, los valores éticos, en el ámbito, académico, personal y social, un libro de texto debe promover las reglas de urbanidad, un libro de texto no es un pasquín, un libro de texto es una herramienta didáctica de aprendizaje.
Es derecho de los padres de familia educar a sus hijos bajo sus reglas, valores, costumbres y creencias, es responsabilidad del profesor introducir al alumno en el mundo del saber y enriquecer su conocimiento teniendo como base las ciencias.
La concentración de este sábado dejo en claro que los chihuahuenses somos gente valiente, noble y leal, y que acudimos al llamado para defender el derecho de nuestros niños, niñas y adolescentes a nuestros hijos o nietos a una educación de excelencia y libros de texto gratuitos y libres.
¡Viva Chihuahua!
