Opinión por: Omar Bazán
Durante la semana que está por concluir, el Congreso del Estado aprobó la propuesta para declarar al día 15 de octubre de cada año, como Día Estatal para la Concientización sobre la muerte Gestacional, Perinatal y Neonatal.
La intención de ello no sólo busca honrar a los bebés que por alguna razón o complicación no pudieron nacer, sino que además, crear conciencia sobre la atención psicológica que deben tener las mujeres que pasan por una situación de este tipo.
Hay que reconocer que desde el año 2021, el cabildo en el municipio de Ciudad Juárez, a través de acuerdo aprobado en la Sesión Ordinaria número 2, de fecha 13 de Octubre del 2021, estableció en el calendario oficial del Municipio el 15 de Octubre de cada año como el “Día de la Concientización sobre la muerte Gestacional, Perinatal y Neonatal” convirtiéndose en la primera ciudad a nivel país y la segunda en Latinoamérica en reconocer este día de manera oficial y como parte de los esfuerzos por visibilizar a todos aquellos quienes se ven afectados por tan lamentable situación.
Resulta también importante conocer las estadísticas, y es que según la Organización Mundial de la salud (OMS), cada año se producen casi 2 millones de muertes prenatales, una cada 16 segundos. Más del 40% de la totalidad de las muertes prenatales ocurren durante el parto, una pérdida que podría evitarse con una atención respetuosa y de mejor calidad durante el parto, incluido el control sistemático y el acceso oportuno a la atención obstétrica de urgencia cuando sea necesario.
Según organizaciones consultadas, la experiencia de una muerte prenatal durante el embarazo o el parto es una tragedia que no se aborda de manera suficiente en las agendas, las políticas ni los programas financiados a nivel mundial. Tiene consecuencias psicológicas para las mujeres y sus familias, como la depresión materna, así como repercusiones económicas; además, puede considerarse un tema tabú y provocar estigmatización.
Datos del INEGI, señalan que tan solo durante el año 2020 se registraron en México 22 mil 637 muertes fetales, las cuales corresponden a una tasa nacional de 6.7 por cada 10 mil mujeres en edad fértil. El 82.9% de las muertes fetales ocurrieron antes del parto, 15.6% durante el parto y en 1.5% de los casos no fue especificado. Por sexo del feto, 11mil 881 muertes fetales (52.5%) correspondieron a hombres y 8 mil 873 a mujeres (39.2%); 8.3% correspondió a casos en los que el sexo no fue especificado.
Se agrega que el 81.7% de mujeres sí recibieron atención prenatal. De ellas, 65.4% recibieron entre 1 y 5 consultas, 29.4% entre 6 y 10, 2.2% tuvo entre 11 y 15 consultas. Además, 0.5% asistió a consulta médica entre 16 y 20 veces y sólo 0.1% recibió más de 20 consultas durante el proceso de gestación que tuvo como desenlace una defunción fetal.
La muerte acaecida durante las etapas fetal, perinatal y neonatal, son comunes en cualquier parte del mundo, dadas las diversas situaciones que se presentan durante el desarrollo de un embarazo, desde las complicaciones durante el parto, las hemorragias previas al parto (incluido el desprendimiento de placenta), las infecciones y enfermedades maternas y otras complicaciones, cuya causa subyacente puede ser la restricción del crecimiento fetal. Incluso sucede por negligencias médicas que con un correcto sistema de salud se habrían podido evitar.
Se estiman en más de 22 mil decesos de este tipo cada año en el país, lo cual trae consigo dolor y luto, así como consecuencias psicológicas y emocionales para las mujeres y sus familias; sin embargo, la mayoría de estas muertes se pueden prevenir y, en su caso evitar, ya que, a pesar de que estamos en el siglo veintiuno sigue siendo un tema del que se habla muy poco, por lo que debemos cambiar la mentalidad de la sociedad al visualizarlo y difundir los posibles tratamientos médicos o psicológicos, para transitarlos de la mejor manera posible.
Por las cifras que ya vimos, resulta fundamental que el estado genere una campaña orientada a la concientización de las cada vez mayores cifras de muerte gestacional, perinatal y neonatal, iniciando por establecer el día 15 de octubre de cada año como el “Día estatal para la Concientización sobre la Muerte Gestacional, Perinatal y Neonatal”.
Además, la propuesta aprobada incluye que todos los Poderes del Estado iluminen con los colores azul y rosa sus edificios durante toda la semana correspondiente al día 15 de octubre de cada año, a fin de recordar a la ciudadanía y generar conciencia, así como conmemorar las muertes de todos aquellos que no lograron un desarrollo gestacional, parto o nacimiento adecuado y fueron clasificados simplemente como muertes fetales, así como el respaldo a todas aquellas madres y padres de familia que sufrieron un proceso de perdida y duelo a causa de alguna de las situaciones que dieron lugar a la propuesta
