– Además de brindar seguridad a los chihuahuenses, son gestores de ayuda para quienes más lo necesitan
Chihuahua.- Entrega de despensas, ropa, medicamentos, sillas de rueda y hasta labores de limpieza y mantenimiento, son algunas de las actividades extraordinarias que los agentes municipales adscritos a la Policía de Proximidad realizan, sin descuidar sus labores de vigilancia preventiva que diariamente llevan a cabo en los diversos sectores de la ciudad.
Como su nombre lo refiere, los policías de proximidad tienen la clara convicción de permanecer cercanos y próximos a la comunidad a la que sirven y protegen, a aquellas personas que bien conocen y con quienes se relacionan tras realizar la vigilancia que les es asignada diariamente, tarea a la que no se han limitado, pues se han tomado muy enserio el compromiso de detectar las necesidades que más los apremian, para convertirse así en sus gestores y poder ayudarlos.
Desde años atrás Policía de Proximidad, grupo de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, se ha caracterizado por su nobleza y sensibilidad hacia los más vulnerables, hacia quienes tienen poco o casi nada, habitantes de colonias periféricas de escasos recursos, o bien de asilos o albergues donde la escasez de insumos y servicios suele ser una constante.
Uno de los principales enfoques de trabajo del actual Gobierno Municipal es lograr mayor acercamiento entre los agentes preventivos y los ciudadanos a través de la detección de las principales deficiencias que se deberán atender, pues cada sector de la ciudad cuenta con problemas característicos que requieren atención focalizada.
Además, a la par, los elementos tienen clara la tarea de detectar problemáticas, no sólo referentes a la seguridad pública, sino de otros rubros en los que ellos puedan intervenir y obtener mejoras, tales como deficiencias en el alumbrado público, en parques o áreas públicas, entre otros, que deterioran la imagen de la ciudad y pudieran implicar un factor de riesgo.
Días atrás, dos adultos mayores que no cuentan buena capacidad capacidad económica, recibieron una despensa que les llevaron los uniformados. Josefina y su esposo Pedro viven en la colonia Lealtad II y debido a su dificultad para ver y transportarse por sí mismos de un lugar a otro, fueron trasladados por los oficiales al Club de Leones, donde les proporcionaron lentes de manera gratuita.
Por otra parte, 38 pequeños, en su mayoría pertenecientes a la etnia ralámuli, que se encuentran internos en la granja hogar “El Camino Hacia Adelante”, ubicada en la colonia Rosario, recibieron la presencia de los elementos policiales para brindarles un poco de alegría a través de un convivio con ellos y entregarles víveres que los propios agentes solicitaron a la asociación civil “Caritas”, al comité de vecinos del fraccionamiento Puerta Savona, a “Panadería Pepillo”, “Todo el Led”, “Celulares y Accesorios de la 20” y “Chicharrones y Carnitas”.