-Entre los temas principales se encuentra, la perspectiva de la niñez, para qué una crianza afectiva, qué función tiene el apego en el desarrollo, y porqué es necesario el autocuidado en la persona cuidadora
Chihuahua, Chih.- Con el objetivo de hacer más eficiente y mejorar el servicio que se da por parte del personal de la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, el DIF Estatal a través del Centro de Fortalecimiento Familiar, impartió el curso, “Crianza Afectiva, para un ambiente libre de violencia”, a personal de dicha institución.
A través del curso, se dieron a conocer herramientas y técnicas para erradicar la idea de superioridad intelectual y moral de las personas adultas frente a un menor, en donde la opinión, deseos, pensamientos y necesidades de cualquier niña, niño o adolescente deben ser tomados en cuenta e incluidos durante los procesos de formación y toma de decisiones en los diferentes ámbitos de desarrollo.
En el taller se ofrecieron herramientas lúdicas, técnicas y contenidos que pueden auxiliar a la sensibilización de madres, padres y cualquier persona dedicada al cuidado, brindándoles recursos para reflexionar e implementar prácticas de crianza respetuosas, empáticas y afectivas.
El primer módulo denominado: ¿Qué significa tener perspectiva de la niñez?, introduce al reconocimiento de los derechos de niñas, niños y adolescentes y a las falsas creencias en torno a la crianza. Además, invita a realizar una reflexión sobre el adultocentrismo y sus consecuencias en la interacción con niñas, niños y adolescentes.
El segundo módulo titulado: ¿Para qué una crianza afectiva?, da una visión integral del proceso de la crianza, alejándose de reduccionismos e ideas preconcebidas, en la que se reflexiona sobre la importancia de brindar un proceso de acompañamiento que genere un ambiente propicio para el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes.
El tercer módulo, de nombre ¿Qué función tiene el apego en el desarrollo de niñas, niños y adolescentes?, se reflexiona sobre la trascendencia de la construcción del vínculo afectivo y su relación con las etapas del desarrollo, dando directrices para una interacción positiva.
El cuarto módulo, llamado: adolescentes y jóvenes, derivado que la adolescencia es un período en el que las modalidades de comunicación son variadas, hay múltiples ambigüedades y silencios, es que se manejan técnicas de mejora.
Finalmente, el quinto módulo, titulado ¿Por qué es necesario el autocuidado en la persona cuidadora?, se muestra la importancia del autocuidado de la madre, el padre y personas cuidadoras, así como la relación que tiene con el bienestar de quienes están en su entorno.