-Cada Gobierno debe ser responsable de realizar la obra pública que la comunidad requiere, señala durante reunión con alcaldesa de Iztapalapa y creadora del programa
-La estrategia de Iztapalapa es ejemplo de un trabajo conjunto entre sociedad y gobierno, asegura
-Hacer esto no sólo ayuda en la seguridad y eleva la calidad de vida, sino que permite ahorros sustanciales para la administración pública, afirma
El gobierno de cada ciudad debe ser el responsable de realizar la obra pública que la comunidad requiere, pues de esa manera se logrará el desarrollo urbano, social, económico y de seguridad que se busca, afirmó el delegado estatal de Programas para el Desarrollo, Juan Carlos Loera de la Rosa, en el marco de la presentación del programa Estrategia Caminos de Mujeres Libres y Seguras.
Durante su gira de trabajo por Ciudad Juárez, el funcionario federal sostuvo una reunión con la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Bujanda Molina, creadora de este programa en dicha localidad.
El objetivo de esta estrategia fue transformar el entorno urbano de Iztapalapa y crear calles limpias, iluminadas y con mayor seguridad.
Comentó que fue la misma administración local quien se encargó de trabajar en la iluminación, limpieza, pintura y pavimentación, todo ello hecho por el Gobierno Municipal, con recursos, mano de obra y material propios.
Dijo que se logró que los costos bajaran significativamente y todo hecho por parte de los trabajadores de la alcaldía, lo que daba un toque de amor y pertenencia a las obras que se realizaban.
Relató que fue tal la integración de la comunidad con el proyecto que ahora la población de Iztapalapa ha retomado las calles y comienza a emerger una economía local, pues las personas salen a disfrutar sus espacios.
Ante ello, Loera de la Rosa comentó que acciones como estas demuestran no sólo la eficiencia de las administraciones, sino también el amor por la ciudad y eso provoca ahorros sustanciales que permiten hacer más con menos.
Explicó que la alcaldía de Iztapalapa transformó su Dirección de Obras Públicas en una verdadera administradora de dinero y trabajo y la construcción de obras con amor y responsabilidad.
“Aquí se hace el trabajo con amor, no por negocio, porque aquí están trabajando y están dando su servicio y una parte muy importante de su vida y desde luego que lo hacen con amor y este es un ejemplo muy bueno que debemos aprender”, mencionó.
