Chihuahua, Chih.- En sesión de cabildo la regidora de Movimiento Ciudadano, Elvira Villarreal dio su posicionamiento ante la manifestación feminista por el 8 de marzo, reitera que los daños que se causaron son mínimos al dolor de perder una hija, hermana o amiga en manos del feminicidio.
A continuación el posicionamiento:
El día de ayer, ocho de marzo, la ciudad de Chihuahua nuevamente fue testigo del caminar de miles y miles de niñas y mujeres lanzando consignas para exigir justicia, para exigir un alto a la violencia por razones de género.
Desde la glorieta de Pancho Villa, hasta la Plaza del Ángel, la avenida Universidad se transformó en un río de cuerpos y de conciencias de mujer. El contingente estaba llegando a la Plaza cuando aún había niñas, adolescentes y mujeres adultas saliendo de la glorieta.
Lo curioso es que NINGÚN medio de información reportó el estimado de personas asistentes a este evento. Ellos, tan dados a reportar sus cálculos con toda oportunidad, quedaron mudos ante la enorme cantidad de mujeres que se sumaron a la manifestación por el respeto y la garantía de nuestros derechos.
La marcha del ocho de marzo del dos mil veinte había sido la más nutrida en toda la historia de nuestra ciudad. La de ayer, sin duda alguna, rebasó con mucho la participación de quienes ya no estamos dispuestas a callar para no incomodar, de quienes ya no regalan su silencio para que sirva de tranquilidad a un Estado que continúa sin garantizar un derecho humano a las mujeres: vivir una vida libre de violencia.
Quienes participamos en la marcha fuimos testigas de la presencia de niñas, adolescentes y mujeres cada vez más jóvenes que decidieron salir a tomar las calles para pronunciarse sobre el rechazo al machismo y a la misoginia que pelean duro por seguir existiendo; el grito sororo y poderoso de mujeres de todas las edades y posiciones sociales y económicas, de distintas expresiones culturales, de distintas orientaciones sexuales, de distintas expresiones de género, debe ser una fuerte llamada de atención a las autoridades de los diferentes niveles de gobierno, para que tomen en serio la voz de ese enorme bloque femenino con una causa común: cero tolerancia a la violencia por razones de género!
Allá afuera, como aquí adentro del Cabildo, a las mujeres nos une el rechazo a la violencia histórica y estructural que hemos vivido. Son más nuestras coincidencias que nuestras diferencias. Ahí radica el poder de nuestra demanda y no nos vamos a detener en exigir que se haga lo necesario para que mujeres y hombres vivamos en condiciones de igualdad, con oportunidades reales de acceso a nuestros derechos y a mejores condiciones de vida.
Lo que hoy se debiera destacar de la jornada de ayer son las miles de voces pidiendo justicia, las miles de pancartas con frases que reflejan una realidad lapidaria: “Disculpen las molestias, pero nos están asesinando”, “De camino a casa quiero ser libre, no valiente”, “El machismo quita vidas sin causar disturbios”. Agradezco la escucha.