Chihuahua y Juárez pueden ser la pauta de cómo atender la violencia contra mujeres y niñas: Investigadora de México Evalúa A. C.

Chihuahua y Juárez pueden ser la pauta de cómo atender la violencia contra mujeres y niñas, con buenas prácticas que pueden ser replicadas en otras partes del país, afirmó Paulina Covarrubias Álvarez. Asistente de Investigación en el Programa de Seguridad y Reducción de la Violencia de la organización en México Evalúa, A. C.

Lo anterior durante la reunión para abordar el tema “Mujeres, niñas y datos de violencia en México, lo que el Estado no ve, no atiende, los casos de Juárez y Chihuahua”, liderado por la organización México Evalúa A. C., Centro de Análisis de Políticas Públicas A. C. y financiado por el Fondo Canadá para las Iniciativas Locales (FCIL).

En acto efectuado en el Salón 25 de Marzo de Palacio de Gobierno, Paulina Covarrubias expresó que la violencia contra mujeres y niñas (VCMN) en Chihuahua es un reflejo de una realidad nacional y que los municipios de Juárez y Chihuahua cuentan con una amplia estructura de instancias con atribuciones ante la violencia contra mujeres y niñas (VCMN).

Destacó que el conocimiento local cuenta con una ventaja que es contar con las herramientas para entender y atender la problemática de la VCMN en y desde su propio contexto.

Dijo que más allá estas ventajas y de las buenas prácticas, existen algunas recomendaciones pertinentes para el trabajo que se desarrolla en los citados municipios como crear un estándar mínimo de variables del Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia contra las Mujeres (BANAVIM).

Precisó que ese estándar debe agregare a los Registros Administrativos (RA) de los casos para reducir omisión de datos en el Banco, usarlo para facilitar intercambio de información entre instancias y utilizarlo arlo como base para crear nuevos RA.

También recomendó impulsar la capacitación de todo el funcionariado en perspectiva de género y estadística, institucionalizar buenas prácticas en manuales y protocolos, integrar la perspectiva de género, definir los procesos de generación de estadística y reasignar presupuestos para garantizar la operabilidad en áreas estadísticas.

Otras de las recomendaciones son socializar manuales y protocolos para garantizar interoperabilidad entre las dependencias, consolidar a través de convenios las mesas interinstitucionales para delimitar objetivos, responsabilidades y periodicidad, socializar la importancia de la producción de información estadística y establecer como prioridad la generación de estadística en materia de violencia contra niñas.

Al dar sus conclusiones, la especialista declaró que los datos deben ir más allá de la numeralia, en las dependencias de Chihuahua y Juárez existe una serie de buenas prácticas que deben ser institucionalizadas para garantizar su continuidad y la posibilidad de replicarlas en otras ciudades del país, y aún al resolver las limitantes de los datos, la VCMN debe ser documentada y atendida de forma integral, o la información estadística no será muy útil para diseñar políticas de prevención y atención a la violencia.

En su intervención, Romain Le Cour, coordinador del programa de Seguridad y Reducción de la Violencia de México Evalúa, señaló que la violencia contra mujeres y niñas tiene que ser un espejo muy fuerte que refleje esta dinámica con muchísimos casos de incidencia delictiva, porque al aluzar los casos contra mujeres y niñas, se debe llamar aún más la atención, para provocar reacciones por parte de las instituciones que tienen el poder de decisión sobre que se hace, que se atiende, como se implementan los programas y adónde van los presupuestos.

Añadió que si no hay presupuesto para atender estos temas, es muy difícil resolverlos, por lo cual la sociedad civil tiene que ir a buscar más y mejor a las instancias nacionales y locales, para ser una fuerza de apoyo sobre este tema.

En su turno, el coordinador del Fondo Canadá para Iniciativas Locales, Aldo González Diosdado, explicó que está investigación fue financiada por el Fondo Canadá que apoya proyectos con pocos recursos financieros pero con gran impacto en la sociedad.

Indicó que se seleccionan y aprueban por le Embajada de Canadá en México, con el objetivo de tener mejores relaciones con la sociedad civil mexicana, reforzar las relaciones bilaterales entre ambos países, así como apoyar temas como equidad de género, empoderamiento de niñas y mujeres, gobernanza inclusiva con énfasis en población indígena, comunidad LGBT+, personas migrantes y refugiadas, desplazamiento forzado, defensores de derechos humanos, desaparición forzada, así como periodistas y libertad de expresión, entre otros.

También se contó con la presencia y participación de la investigadora Asociada del programa de Seguridad y Reducción de la Violencia de México Evalúa y profesora del Tecnológico de Monterrey, María Teresa Martínez Trujillo, quien estuvo como moderadora del evento.