Carlos Rodríguez Mota cuenta con solo 18 años de edad, pero desde los cuatro comenzó a tomar la pelota y el bate, tal y como lo hicieron algunos miembros de su familia en el béisbol.
“Todo para mí es el béisbol, aún más con esta familia con quien siempre vivimos, desayunamos, comemos y cenamos béisbol y pues es algo muy importante para mí”, dijo el joven pelotero, quien nació el 11 de agosto del 2003.
El residente de la colonia Hacienda de las Torres siente que el béisbol corre por sus venas y ahora sueña convertirse en jugador profesional y entrar a las grandes ligas. Actualmente juega en la Liga Invernal con la sucursal de los Diablos Rojos de México de la Liga Mexicana.
En su trayectoria destacan tres olimpiadas nacionales en las que compitió victorioso, así como haber jugado para equipos en las ligas Villahermosa, El Granjero y de la Liga Invernal Paso del Norte, con la novena de Nuevos Valores.
Rodríguez dijo que entre sus objetivos a futuro es jugar profesionalmente y si por algo no lo consiguiera, le gustaría conseguir una beca para ir a Estados Unidos a jugar este deporte.
