Por: Profr. José Luis Fernández Madrid
Criminal resulta la medida tomada por parte de quien sin el más mínimo respeto y con una alta dosis de ninguneo, con su inexplicable determinación de retrasar sueldos y aguinaldos a los jubilados y pensionados mandan un desafortunado mensaje de que no lo merecen.
…Y tienen razón, no merecen sólo el aguinaldo, merecen el respeto, la consideración y la demostración de orgullo por parte de la sociedad toda al haber entregado su vida, con pasión y determinación, a educar a generaciones enteras.
El magisterio de Chihuahua no es el responsable de la pésima administración de un ex gobernador irresponsable y frívolo que, heredando una descomunal deuda dejó al Estado quebrado, siendo los maestros y maestras quienes hoy, deban pagar por su pésima conducción durante 5 años.
Denigrante el trato brindado a la base magisterial de jubilados y pensionados que, una vez más, se les grita que son de poca valía cuando debe ser exactamente lo contrario ante la enorme responsabilidad que les fue conferida y realizada con creces por más de 30 o hasta 50 años.
Tributos y monumentos al valeroso personal retirado de las labores docentes son importantes reconocimientos, pero el garantizar en tiempo y forma sus prestaciones, pagos bonos y en general toda aquella retribución ganada a pulso, es todavía mayormente trascendental para vivir su jubilación con dignidad y decoro.
Nadie tiene derecho a despreciar o infravalorar a los profesores y profesoras así como al personal de apoyo y asistencia a la educación retirado y activo; bajo ninguna circunstancia es permisible ni tolerable el agravio.
Una clara muestra de que importan y mucho, de que fueron y son agentes de cambio existen en demasía, sin embargo es importante hacérselos saber con hechos.
Mi consideración y respeto a todos y todas.
