“Es una delicia escucharlos, es todo un espectáculo. Se te pone la piel chinita de emoción, una vibra impresionante; por eso quiero felicitar a las niñas, niños y jóvenes participantes, a sus padres, maestros y a la Fundación Azteca por hacer esto posible”, dijo la presidenta del DIF a la salida del evento que reunió a gran parte de la sociedad juarense, quienes siguieron las recomendaciones para evitar la propagación de Covid-19.
La orquesta llevaba más de dos años sin presentarse. El maestro Jove García, director artístico del proyecto indicó que en el concierto tomaron parte 150 músicos de entre 7 y 20 años de edad, quienes extrañaban hacer música para un público en vivo. El programa estuvo formado por nueve piezas, iniciando con “Irish Suite” del estadounidense Leroy Anderson.
Por su parte, Ricardo Aubert y Gilberto Cuevas, de Fundación Azteca y de la Fundación del Empresariado Chihuahuense, respectivamente, expresaron su beneplácito por la gran gala de música clásica, por el significado y compromiso con la infancia en la comunidad.
“Queremos que más jóvenes se sumen a este proyecto espectacular. Un joven que toma un instrumento musical, difícilmente toma un arma”, puntualizó Aubert, en tanto que el presidente de FECHAC en Ciudad Juárez, patrocinador del concierto, dijo: “Para nosotros apoyar a las niñas, niños y adolescentes es muy importante. A través de la música los alejamos de situaciones de violencia. Como empresarios estamos comprometidos con la niñez y los seguiremos apoyando”.
Tras ser galardonada con un ramo de flores por su labor al frente de la institución y entrevistada sobre cuál había sido su pieza favorita en la presentación, Rubí Enríquez dijo que le encanta “Hallelujah del Oratorio El Mesías”, del alemán Georg Friedrich Handel.