Chihuahua, Chih.- Durante su toma de protesta como presidente municipal de Chihuahua para el periodo 2021- 2024, Marco Antonio Bonilla Mendoza, destacó que uno de sus principales objetivos pasa por hacer de Chihuahua la ciudad más competitiva de México, no sólo desde el punto de vista económico, sino también desde el social y el medio ambiente.
Bonilla señaló que había fijado como síntesis de su propósito al frente del Ayuntamiento el “hacer de Chihuahua la ciudad más competitiva de México, no sólo del estado, sino de todo México”. Manifestó que en primer lugar el término competitivo en una ciudad tenía una acepción económica, si bien afirmó que si muchos pensarían que sólo representa ser atractiva en materia de inversiones, como síntoma de crecimiento, también representa que las inversiones de la industria detonen cadenas de valor agregado.
El alcalde manifestó que las dimensiones de la competitividad son muchas, que una ciudad segura es competitiva, que una ciudad iluminada es competitiva, que una ciudad con excelente servicio médico es competitiva, y esa entre otros elementos es tarea del gobierno, apuntando que también es competitiva una ciudad donde haya una oferta educativa de calidad.
“En una ciudad competitiva no estamos esperando que el futuro nos alcance y nos arroye, nos preparamos para aprovecharlo”, afirmó, “creamos conocimiento (…), nuestro valor más grandes in duda alguna son las y los chihuahuenses”.
Bonilla señaló que una ciudad competitiva es dueña de su información y uso honesto y razonable de sus recursos, tanto en lo que tiene que ver con lo económico como con el tiempo de los ciudadanos.
“En la competitividad existe también la dimensión social, en una ciudad competitiva la gente tiene servicios, salud, recreación, encuentro y convivencia de las familias, una ciudad competitiva es también una ciudad solidaria, que no se olvida de sus pobres, de los niños sin padres o con menos oportunidades de desarrollo”, y que está al lado de quienes sufren la pobreza, la impunidad o la injusticia, refirió.
Aseguró que muchas veces se califica o valora el desempeña el quehacer de un gobierno por la obra material, pero enfatizó que un buen gobierno también es el que se preocupa por la obra social en zonas de mayores carencias y en las sociedades más sentidas. También señaló que también lo es la administración que brinda oportunidades para todos y pone al centro de todo al ser humano, la “que hace posible lo más bello para los más humildes”.
Agregó que una ciudad competitiva es amigable con el medio ambiente y anunció que su administración promoverá “una cultura de encuentro con la naturaleza pues la queremos y la preservamos” y recordó cómo los chihuahuenses habían luchado, incluso con su libertad y su vida, “por lo más escaso que tenemos, nuestra agua”.
Para terminar con este apartado, Bonilla manifestó que “en una ciudad competitiva hay paz social, gobernabilidad, contar con una ciudad participativa, que señala el rumbo, marca prioridades, que opina con libertad y que exige resultados sin excusas”.