A las/os trabajadoras/es de la educación;
Al pueblo en general;
A los medios de comunicación:
“Estudiar significa conocer los problemas del pueblo, compenetrarse de sus sentimientos y de sus aspiraciones, buscar en la palabra del maestro y en la del libro aquello que sirva para resolver esos problemas y realizar esas aspiraciones, examinar las experiencias y las enseñanzas de las generaciones anteriores y ver cómo han afrontado las situaciones que les tocó vivir”.
Arturo Gámiz
En relación con los sucesos ocurridos el pasado 18 de mayo en el estado de Chiapas, donde fueron reprimidas/os por la policía estatal alrededor de 250 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Mactumatzá (incluidos algunos aspirantes a ingresar), manifestamos nuestro total rechazo al uso de la fuerza y la ausencia del diálogo, y exigimos la liberación inmediata de las/os estudiantes que permanecen detenidas/os (74 mujeres y 19 hombres).
En uso legítimo de sus garantías y libertades, las/os estudiantes manifestaban su rechazo a la aplicación virtual (por internet) del examen de ingreso a la Normal Rural de Mactumazá, pues de esa manera se impide la participación de las/os aspirantes más pobres y quienes viven en las comunidades más apartadas, que no tienen computadora y buena señal de internet ni los medios para conseguirlas.
A pesar de que el semáforo pandémico en el estado de Chiapas se encuentra en color verde, las peticiones de las y los estudiantes no fueron (ni han sido) escuchadas por las autoridades, en contraste con las facilidades que se brindan a las actividades partidistas y demás acciones de carácter político-electoral.
Lo cierto es que, detrás la insensibilidad de las autoridades, hay una discriminación y privación de oportunidades a las hijas e hijos de las familias más humildes; en este caso, al condicionar su posibilidad de ingreso a la educación superior mediante exigencias que, para ellas y ellos, son más difíciles de sortear por sus condiciones de vida.
Denunciamos los hechos ocurridos como parte de un ataque sistemático al normalismo rural, del que abundan evidencias, algunas tan graves como el asesinato de varios estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, y la desaparición forzada de 43 de ellos en 2014, sin que hasta la fecha se hayan esclarecido los hechos y, desde luego, exigimos la intervención del Gobierno Federal, en congruencia con el compromiso del Presidente de la República respecto a la defensa, respeto y fortalecimiento del normalismo rural.
Por lo anterior, como movimiento RESISSSTE-CNTE, nos unimos a las voces de repudio a la represión de estudiantes y exigimos:
- Liberación inmediata e incondicional de las y los jóvenes detenidos.
- Respeto y solución a las exigencias de las y los estudiantes en favor de quienes radican en las comunidades aisladas, que denuncian las condiciones de desventaja que les impone la aplicación virtual del examen para el ingreso a la Escuela Normal Rural de Mactumactzá y demandan la posibilidad de sustentarlo de manera presencial.
- ¡Alto al acoso y criminalización de los estudiantes pobres!
MOVIMIENTO RESISSSTE-CNTE DEL ESTADO DE CHIHUAHUA