Burla en la promoción docente del COBACH

Por: Profr. José Luis Fernández Madrid

Después de un largo periodo en el que las autoridades del Colegio de Bachilleres de Chihuahua no sacaban convocatorias para que los y las docentes del COBACH accedieran a una promoción y, con ello, se revalorizara su vocación, por fin salió el documento esperado, pero…oh decepción.

Tras una larga espera que se prolongó por años ante la indolencia de la autoridad, hace unos días se publicó una convocatoria que más parece que solamente se hizo para cubrir las apariencias que un verdadero reconocimiento al personal magisterial; ofrecer sólo 28 cambios de categoría para los más de 1200 docentes que conforman el subsistema suena a burla.

No obstante la ínfima cantidad de recategorizaciones puestas a concurso, la signante del insultante documento dividió a los maestros en dos: los del centro-sur del estado y otros del norte, siendo estos últimos los más perjudicados pues para ellos solo habrá 4 ascensos.

Por si  no fuera suficiente, de un plumazo inhabilitaron a maestros y maestras con menos de 20 horas de carga académica; simple y sencillamente los hicieron invisibles, indignos de subir de status y con ello mejorar sus percepciones económicas: una absurda e inexplicable discriminación.

Aunado a lo anterior, no todas las categorías son sujetas de ascenso, la disponibilidad para cambiar de ellas quedó a criterio de la autoridad y, por si fuera poco, los requisitos solicitados para los concursantes son una montaña de documentos y evidencias difíciles de reunir en el corto lapso que dieron para ello.

¿Tienen dedicatoria los cambios de categoría? Al menos una explicación medianamente convincente merecen los y las docentes ante este atroz atraco a sus legítimas y bien ganadas aspiraciones.

Aún en el ocaso de su administración es urgente y apremiante que la autoridad del COBACH deje su visión de que existen maestros y maestras de primera y de segunda, que en realidad hagan válida la palabra meritocracia que tanto pregonan y la conviertan en realidad; es injusto pretender burlarse del siempre valioso personal que por años le ha dado lustre y prestigio a la institución.

Es indigno el trato brindado; es en estos difíciles tiempos de pandemia en el que el magisterio trabaja 24/7 cuando mayormente debe de reconocérsele su esforzada y comprometida labor y no parece que la autoridad del COBACH lo entienda y al contrario, lo desestima, lo sobaja, lo ignora.