Tiempos de política: partidista y sindical Sección 42

Opinión por: Mtra. Erika Gabriela González Gaytán

Mucho revuelo está causando la política partidista hoy en día, con encantos y quizá muchos más desencantos, pero lo importante pues para el Magisterio Estatal es no quedarse inmóvil ante este o cualquier otro escenario.

Las piezas se mueven y lo seguirán haciendo guste o no, lo que hoy acontece entre partidos rumbo al proceso electoral 2021, tendrá su impacto de forma ineludible en el ámbito sindical; elaboremos pues centrados en este terreno algunas reflexiones a partir de simples interrogantes: ¿quiénes fueron los actores y cómo fue la relación «empleado-patrón» durante el gobierno Duartista?, ¿o cómo ha sido dicha relación en el actual gobierno de Javier Corral?, ¿qué o el voto de quién los llevó al poder o quizá fue la ignorancia, el desinterés, el hartazgo social?

Algunos podrán valorar las respuestas a los planteamientos anteriores de manera positiva, en lo general o en puntos específicos, mientras que otros los perciben como acontecimientos absolutamente negativos; pero agreguemos algunos cuestionamientos más: ¿a dónde nos han llevado a los maestros ambas elecciones?, ¿cuáles son las implicaciones, los costos de esas «buenas o malas» relaciones entre sindicato como empleado y gobierno como patrón?, y ¿en qué circunstancias nos tienen hoy por hoy como base trabajadora?

Es cierto, en el panorama electoral partidista de hoy, la «opción» inmediata, la alternativa, la posible, la acorde a las necesidades de los oprimidos, ha generado incertidumbre, descontento, respecto a sus proceso internos y a sus figuras representativas, no del todo convincentes dicen algunos, en cuanto a su capacidad de respuesta ante la fuerte exigencia de un cambio profundo y de la justicia que buscan los diferentes sectores de la sociedad.

Sin embargo dos procesos tan íntimamente relacionados, la política partidista y la política sindical, nos vayan bien o mal, representan un tema de gran relevancia al que es necesario dedicarle tiempo y preguntarse una vez más: ¿hacia dónde vamos o hacia dónde queremos ir?, ¿de qué lado de la balanza se pondrá el peso de la voz Magisterial?; porque son la relación «empleado-patrón» y sus respectivas consecuencias las que se estarán definiendo y posteriormente viviendo ya como una realidad luego del próximo 6 de junio.

El gobierno electo, sus principios, sus valores e ideología estará marcando el futuro del magisterio estatal como lo hizo Duarte condenando a nuestro gremio a sufrir con creces las consecuencias de la corrupción, de los malos manejos de los recursos del Estado, de los acuerdos, favores e intercambios políticos vaya, poniendo en juego las peores cualidades y mañas priistas; o como lo está haciendo Corral, al remarcar la diferencia de clases entre los ciudadanos, acciones que promueve su ideología partidaria, denostando, ignorando no sólo al gremio educativo, sino poniendo oídos sordos a las más graves problemáticas sociales en lo general, protegiendo incluso en los últimos días a las instancias deudoras a costa de las vidas perdidas en Pensiones Civiles del Estado (PCE), como si la vida de la clase trabajadora fuese menos valiosa que las de aquellos que por su posición económica no tienen problema alguno en pagar los costosos servicios de salud.

Y este precisamente, el servicio de seguridad social, el servicio de salud es el eslabón más importante que vincula ambas políticas, la política partidista y la política sindical.

Obviamente la ideología de izquierda se refleja en el texto, no hay empacho en reconocerlo, pero más allá de ello, más allá de preferencias partidistas personales, es tiempo de reflexionar colectivamente sobre lo que está en juego por una parte, en las próximas elecciones federales, ¿cuál será la fórmula que pueda sacar adelante o por lo menos ofrecer posibilidades de solución ante una situación tan crítica y prioritaria como la que guarda PCE?; y por otro lado también es necesario centrar la atención en la próxima renovación de la Sección 42 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), ya que en el mismo sentido es un proceso no menos importante y determinante para las maestras, los maestros y sus familias.

Las fechas de la renovación seccional se encuentran pendientes pues el SNTE aún no emite las debidas modificaciones al estatuto para la consecuente aprobación, por parte del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCyA), del reglamento para renovaciones seccionales.

El retraso se origina por las condiciones de la pandemia Covid-19, así como por la obligación del SNTE de atender primeramente a las observaciones hechas -no ha profundidad- por la Secretaría del Trabajo y que obedecen a la detección de irregularidades que violan la Ley Federal del Trabajo y, facilitan a la cúpula sindical perpetuarse en el poder; aunado a dichas observaciones está también la reciente determinación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en la que ésta, desechó amparos de sindicatos en contra de la Reforma Laboral de 2019, dejando claro que elementos como el voto libre, personal, directo y secreto, la rendición de cuentas sobre el estado que guarda el patrimonio de los sindicatos, la supervisión de los procesos sindicales por parte del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL), el derecho a la negativa de retención de cuotas (ilegales) entre otros puntos, no incurren en una violación a la libertad y autonomía de los sindicatos.

Toca pues al SNTE ajustar estatutos y reglamento conforme a lo dispuesto en la ley para que la renovación se dé en verdad dentro de un marco democrático.

Siendo la renovación seccional un proceso interno, que nos pertenece como agremiados a la Sección 42 del SNTE, es importante conocer y reconocer que resulta fundamental la participación sustentada de todos y cada uno de nosotros, de tal manera que podamos construir democráticamente una representación que pueda trabajar idealmente con un gobierno/patrón con apertura, respeto, disposición a la construcción de soluciones para nuestras más sentidas problemáticas pero que al final e independientemente de los resultados de las elecciones federales en puerta, sea una representación sindical que pueda hacer frente a los retos actuales y futuros de nuestro gremio.

Es necesario estar pues en vigilia, pendientes, socializando ideas, intercambiando opiniones, cuestionando y cuestionándonos; pues no se trata de imponer partidos, ideologías, personas o grupos, sino de formar cada uno nuestro propio criterio fundamentado idealmente en los hechos, pasados y recientes; para luego crear todos juntos una conciencia colectiva-participativa que trabaje por el bien común.

Ya se perdieron vidas, importantes prestaciones, se han violentado derechos, tenemos un Servicio de Seguridad Social comprometido, expectativas tambaleantes ante una jubilación justa, generaciones jóvenes en condiciones salariales indignas, maestros y maestras de todos los niveles sujetos a procesos burocráticos interminables que se convierten prácticamente en un viacrucis para poder ejercer derechos como la basificación, asignación de horas o el acceso a procesos para la obtención de incentivos económicos.

Se realizaron múltiples manifestaciones, movilizaciones, señalamientos, peticiones, se ha acudido a diversas instancias, dependencias, autoridades, gobierno, congreso, comité y la constante en su mayoría siempre ha sido, sin importar la problemática, la ausencia de respuestas y soluciones sólidas, la indolencia y el cinismo.

En contra siempre de los discursos demagógicos, hagamos el intento, al menos el genuino intento de cambiar el curso de la historia, de sacar la corrupción de nuestra institución de seguridad social, de apoyar auténticos liderazgos y acabar con el monopolio sindical de nuestra Sección 42 del SNTE.

ES TIEMPO DE TOMAR ACCIÓN, DE SUMAR VOLUNTADES, ES TIEMPO DE AYUDARNOS A NOSOTROS MISMOS A CONSTRUIR UN MEJOR FUTURO LABORAL, EMPECEMOS POR INFORMARNOS, DESARROLLEMOS UN SENTIDO DE PERTENENCIA NO SOLAMENTE A LA SECCIÓN 42 SINO HACIA LAS PROBLEMÁTICAS, HACIA NUESTRAS PROBLEMÁTICAS; SEAMOS A PARTIR DE AHORA CONSTRUCTORES, PROMOTORES, DEFENSORES Y PARTICIPES RESPONSABLES DE UN EJERCICIO CIUDADANO Y SINDICAL VERDADERAMENTE DEMOCRÁTICO!!!