- Informa presidente del Consejo de Administración, Ismael Rodríguez Gallegos, en el programa Chihuahua Adelante que al concluir la administración estatal, a cargo de Javier Corral, se habrán invertido 187 mdp para llevar el servicio a más de 33 mil personas de pueblos originarios
- Agradece aportación de las OSC: “Hay mucha iniciativa y vocación en la participación ciudadana, el Gobierno del Estado tiene la obligación de buscarlo, invitarlo y reforzarlo”
Chihuahua.- De la mano de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS) ha llevado el servicio a más de 8 mil familias de pueblos originarios asentados en la Sierra Tarahumara, mediante cosechas de agua y sistemas colectivos, informó el presidente del Consejo de Administración, Ismael Rodríguez Gallegos.
En su participación en el programa Chihuahua Adelante, presentó los logros del organismo descentralizado del Gobierno del Estado, mediante una estrategia de atención a grupos tradicionalmente excluidos de la dotación de agua potable, por su situación topográfica.
“Al concluir la presente administración estatal, a cargo de Javier Corral, se habrán invertido 187 millones de pesos, en beneficio de más de 33 mil personas de la Sierra Tarahumara”, afirmó.
El funcionario de la JCAS observó que “llevar agua a la Sierra nunca se había hecho porque es carísimo. Es una proporción de 1 a 10 en el costo, comparado con las zonas urbanas”.
Para resolverlo se acudió a las OSC que ya tenían experiencia en ejecutar mecanismos innovadores para solucionar la problemática de desabasto en regiones serranas de difícil acceso.
“Hay mucha iniciativa y vocación en la participación ciudadana, y ya existe ese trabajo. Desde mi punto de vista, el Gobierno del Estado tiene la obligación de buscarlo, invitarlo y reforzarlo”, señaló.
De esta manera, se decidió implementar las alternativas de cosechas de agua y sistemas colectivos, que incluso involucró la participación de las propias personas beneficiadas, que es el Pueblo Rarámuri.
Ismael Rodríguez explicó que las cosechas de agua consisten en cambiar los techos planos de las casas, por unos de dos aguas que además cuentan con tubos mediante los que se recolecta el agua de lluvia, que proviene del derretimiento de la nieve.
El líquido captado va a un tinaco con un filtro y eso permite tener dotación para varios meses, agregó.
Indicó que el objetivo es que dejaran de recorrer largos trayectos para traer agua de fuentes que incluso provocaban enfermedades gastrointestinales y de la piel: “esos niveles han disminuido mucho gracias a que ahora se abastecen con las cosechas de agua y los sistemas colectivos”.
A su vez, el sistema colectivo de agua consiste en encontrar un aguaje que tenga abasto la mayor parte del año y colocar mangueras que por gravedad llevan el agua hasta los hogares.
“Y la presión que encuentran muchas veces es mejor que la que se tiene en la ciudad”, mencionó.
Agregó que los sistemas colectivos de agua incluso permiten tener pequeños invernaderos familiares, para la producción de alimentos de autoconsumo.
“Es indudable que esto nunca se había hecho, y luego quiero decir que lo iniciamos, hicimos estas dos cosas, con puros ahorros en la Junta Central de Aguas, recuerdo que vendimos los carros de lujo que tenían los exfuncionarios y juntamos 3 millones y medio de pesos y también se hizo una optimización de recursos”, dijo.
Señaló que de los 187 millones de pesos contemplados para invertir en dotación de agua potable al sector poblacional que hasta antes de la presente administración estatal fue excluido, cerca de 48 millones fueron aportados por la Fundación Gonzalo Río Arronte.
De igual manera, la empresa Transcanada, constructora y operadora del gasoducto que atraviesa la Sierra Tarahumara disponía un Fideicomiso con el que decidieron apoyar las cosechas de agua e invirtieron 25 millones de pesos.
“Entonces, ha sido muy exitoso y no se debe dejar de hacer, si en 4 años y medio logramos el beneficio para aproximadamente 8 mil familias, el resto no tienen que esperar a que pasen 20 años, si lo continuamos y vamos creciendo, en unos 7 y 8 años debemos terminar y que cerca de 100 mil familias de la Sierra tengan agua, y no es complicado”, afirmó Ismael Rodríguez.
En ese sentido, agradeció a las OSC Captar (Centro de Acopio para la Tarahumara), Cedain (Centro de Desarrollo Alternativo Indígena), Cofam (Comunidad y Familia), ECOS (Comunidad Sustentable), y Fortalecimiento Comunitario y del Medio Ambiente (Formac), por su contribución a ejecutar las cosechas de agua y los sistemas colectivos.