Tomado del muro de Face del Blog del Maestro
Este es mi papá Alejandro Navarro, el día antes de su fallecimiento, preocupado por finalizar las calificaciones para los informes de progreso.
Sabía que iba a la sala de emergencias, por lo que empacó su computadora portátil y el cargador para poder ingresar.
Los médicos venían a verlo. Le estaban haciendo pruebas, le decían que tenía que decidir sobre: ¿qué quería en caso de que su corazón se detuviera? RCP, intubación o irse en paz. Respondía a sus preguntas sin dejar de enfocarse en finalizar las calificaciones.
La última vez que lo vi fue el lunes y pasó las dos horas que estuve en su casa trabajando. Ojalá hubiera cerrado su computadora portátil y hubiera disfrutado la última oportunidad de pasar tiempo conmigo.
Los maestros dedican tantas horas extras, horas que muchos no se dan cuenta. Incluso durante una pandemia, incluso durante una crisis de salud, los maestros se preocupan por cumplir con sus deberes.
¡Agradece y aprovecha a tus profesores!
Si estás casado/a con uno/a, ayúdele a establecer límites; si eres hijo/hija de uno, no lo dejes trabajar demasiado una vez que esté en casa. Y a los alumnos, sé amable con tus profesores.
Maestros no normalicen el trabajo fuera de su horario, no normalicen quedarse en el trabajo hasta muy tarde.
Eres reemplazable en el trabajo.
¡NO ERES REEMPLAZABLE EN CASA!💔
Papá, ¡Te extrañaremos mucho!
¡Fuiste el mejor maestro de todos!
¡Te amo hasta siempre!
PD.
Mi padre no falleció de Covid ni nada relacionado.
Tomado del muro de:
–Sandra A. Venegas.
