Buenos Aires. Los incidentes dentro de la Casa Rosada, con seguidores que coparon los patios internos de la sede del gobierno argentino, obligaron este jueves a retirar el féretro de Diego Maradona de la capilla ardiente, mientras en la calle la policía se enfrentaba a los aficionados.
El traslado del féretro fue confirmado a la Afp por una fuente del gobierno, justo después de que las autoridades anunciaran la extensión por tres horas del velatorio del 10.
En varias calles del centro de Buenos Aires, cerca de la sede gubernamental, la policía reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos a grupos de hinchas que arrojaban botellas y piedras.
Los restos de Maradona, fallecido el miércoles a los 60 años, serán enterrados en un cementerio privado de la periferia norte de la capital argentina.
Fuente: La Jornada