Chihuahua.- Durante la comparecencia ante la Cámara de Diputados de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, solicitó además que se investigue la explotación neoliberal de ríos, lagos y presas. El gobernador de Chihuahua, dijo, “se ha dedicado a fomentar la violencia”.
Durante la comparecencia de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ante la Cámara de Diputados, el Diputado Federal por Chihuahua, Ulises García Soto, retomó el tema de las presas en Chihuahua para solicitar que se audite a la Asociación de Usuarios de Riego del Estado (Urech), a los Distritos de Riego de Chihuahua, así como a las sociedades de responsabilidad limitada encargadas de “administrar” las concesiones de agua, encabezadas por Salvador Alcántar.
Además, pidió que se investigue a los instigadores de las manifestaciones en las que se generó violencia.
La titular de la dependencia federal, Olga Sánchez Cordero compareció ante la Comisión de Gobernación de la Cámara de Diputados el jueves anterior, donde dijo con firmeza que el agua es de la nación, las presas son instalaciones estratégicas de seguridad nacional y, como tales, deben ser custodiadas por la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano.
“La competencia es federal sobre las aguas nacionales y las presas como instalaciones estratégicas de seguridad nacional, si eso no queda claro, que quede claro: la competencia es federal, el agua es nacional y las presas son instalaciones estratégicas de seguridad nacional del Gobierno de México”, enfatizó.
En su intervención, García Soto consideró que, así como se combatió con la inteligencia y no con armas el huachicol en Pemex, ahora la tarea de la Cuarta Transformación es acabar con el huachicol de agua en el estado de Chihuahua.
Los diputados de Morena, indicó, envían un mensaje a los adversarios conservadores del estado de Chihuahua: su respaldo es para la Secretaría de Gobernación.
El tema del agua en Chihuahua alcanzó una relevancia que nunca se había visto, luego de convertirse de un tema ambiental a uno jurídico, de seguridad y políticamente enrarecido, planteó el Diputado Federal de Morena por Chihuahua, Ulises García Soto.
Para los diputados de Morena y millones de chihuahuenses, queda claro que existen intereses políticos de por medio, encabezados por el actual gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, para entorpecer el cumplimiento del Tratado Internacional de Aguas entre México y Estados Unidos de 1944.
“Le hemos exigido al gobernador que promueva el diálogo y la solución pacífica de controversias; por el contrario, se ha dedicado a fomentar la violencia, poniendo de frente a los presidentes de los distritos de riego y chantajeando a los agricultores para que asistan a las manifestaciones”, expuso.
Añadió que a esta compleja situación se le suma un legado neoliberal de jugosos negocios hechos con los recursos naturales, no sólo imperaron las fugas clandestinas de gasolina en Pemex, sino que se extendieron también a los ríos, lagos y presas que están llenas de huachicoleros.
La Cuarta Transformación, dijo, estableció el hecho de que Chihuahua tiene asegurado el cien por ciento de agua para el recién concluido ciclo agrícola y el tratado debe quedar cumplido a finales de este mes.
Ante las circunstancias actuales, la oposición pone en riesgo la buena relación que con tanto trabajo ha construido el Gobierno de México con Estados Unidos, así como la revisión del compromiso internacional.
García Soto indicó que, aunque esta situación involucra a otras instituciones como Semarnat, Conagua, CILA, y la Secretaría de Relaciones Exteriores, la Secretaría de Gobernación debe asegurar el pago de agua a Estados Unidos y también lo correspondiente para los agricultores mexicanos.
“Como representantes populares, obvio que estamos para atender a los campesinos chihuahuenses… esa ha sido siempre la prioridad de la Cuarta Transformación, que no les falte agua, como no les ha faltado a los agricultores del estado de Chihuahua”, comentó.
