-Contar con Equipo de Protección Personal suficiente para los trabajadores del HGR No. 1 y apoyar a los módulos respiratorios de las UMF No. 2, 4 y 69 en la ciudad de Chihuahua, está entre sus tareas
Chihuahua, Chih.- Para la doctora Flor de María Flores Legarda, con 13 años de servicio ininterrumpido en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), significó un gran compromiso y responsabilidad aceptar hacerse cargo de los Equipos de Protección Personal (EPP) en el Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Morelos”, cargo al que fue comisionada desde el pasado mes de abril por la Dirección General del IMSS.
Ella es jefa de la Coordinación de Evaluación de los Servicios de Salud en el Trabajo y aceptó la tarea de los insumos con gusto y disponibilidad, por tratarse de apoyar a sus compañeros de trabajo, tanto personal médico como de enfermería y otras categorías que atienden diariamente pacientes sospechosos y con diagnóstico COVID-19.
La funcionaria explicó que el objetivo es que todos ellos cuenten con la protección necesaria, eviten contagiarse y brinden un servicio con mayor seguridad, calidez y oportunidad a los derechohabientes.
Flores Legarda afirmó que cada pieza del equipo es más que un simple número o un elemento estadístico, ya que significa la salud y vida de los trabajadores, que para ella representan rostros de amigos, colegas, hijas, hijos, hermanos, padres de familia, a quienes diariamente los esperan en casa, después de una ardua y difícil jornada laboral.
Dicho encargo lo desempeña con jornadas completas, incluso en días descanso, que por su gran sensibilidad, amor a la profesión y condición de mujer, madre y esposa, ha luchado por asegurar la suficiencia en la adquisición y distribución de insumos para las áreas COVID de ese nosocomio.
“Muchos son amigos, conocidos, son mujeres y hombres que están dando todo de sí, en la primera línea de batalla contra el coronavirus”, aseguró jefa de la Coordinación de Evaluación de los Servicios de Salud en el Trabajo.
“Es una gran responsabilidad, porque mi tarea es asegurar que se tenga a tiempo el insumo, es verificar directamente en Abasto y hacer las proyecciones necesarias para que a mis compañeros nos les falte ninguna bata, mascarilla, botas, caretas, guantes, gorros, alcohol gel y puedan realizar su trabajo con el menor riesgo posible”, compartió.
Inicialmente, sólo entregaba material al área COVID del HGR No. 1, pero conforme avanzó la atención en la emergencia sanitaria ahora la entrega se realiza también a los quirófanos y al área de cocina y demás áreas del hospital, la planta de lavado de Chihuahua, así como el apoyo a los módulos respiratorios de la Unidades de Medicina Familiar (UMF) No. 2, 4 y 69, así como la Clínica de Mama.
Su trabajo es especial y confiesa que “en un principio era muy estresante por la búsqueda de estrategias para identificar el equipo que cada persona requiere, revisar la calidad del equipo y estimar las cantidades suficientes. Tanto en lo personal, como el equipo de trabajo que me acompaña, hemos aprendido bastante, sobre todo en apoyar a nuestros compañeros, atender sus inquietudes y valorar su labor”.
“Estoy muy satisfecha con poder contribuir en esta contingencia sanitaria con mi trabajo y experiencia para que mis compañeros estén lo más protegidos posible”, concluyó.