- Por concluir construcción de tres vasos de captación de agua de lluvia, con capacidad de almacenar más de 40 mil metros cúbicos, que se filtrarán al subsuelo para recargar mantos acuíferos; con inversión de 51.3 mdp del Fideicomiso para Puentes Fronterizos
- “Cuando los recursos son limitados y las finanzas están estrechas, deben invertirse para resolver necesidades básicas, estratégicas”; señaló el gobernador Javier Corral
Ciudad Juárez, Chihuahua.- Con el propósito de salvaguardar la vida y el patrimonio de todos los y las juarenses y mejorar su calidad de vida, Gobierno del Estado, construye tres vasos de captación de agua de lluvia en el Fraccionamiento Pradera Dorada, de Ciudad Juárez.
Estas acciones, que forman parte del «Proyecto integral de obras y acciones para el Manejo de Agua Pluvial de la Zona Metropolitana de Ciudad Juárez, Chihuahua», se realizan con una inversión de 51.3 millones de pesos del Fideicomiso de Puentes Fronterizos de Chihuahua.
Este año se concluirán estas tres importantes obras, cuya capacidad total de almacenamiento es de 40 mil metros cúbicos, a fin de evitar inundaciones y contribuir a la recarga de los mantos acuíferos, ya que en un tiempo aproximado de 72 horas se infiltra al subsuelo.
El gobernador Javier Corral, acompañado por Sergio Madero Villanueva, director general del Fideicomiso de Puentes Fronterizos de Chihuahua y Óscar Ibáñez Hernández, director ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS), realizó un recorrido de supervisión, para constatar los avances.
“Resolver el tema de las inundaciones en Ciudad Juárez debe ser un compromiso de todo gobierno”, expresó el gobernador, “porque de esta forma se contribuye a conservar la infraestructura urbana, a proteger a las personas y el transporte urbano, además de que le genera a la ciudad un mejor medio ambiente”, agregó.
“El problema es que no todos los gobiernos le quieren invertir a este tipo de infraestructura que no está a la vista”, señaló “hemos rechazado ser un gobierno de relumbrón, de fachada, de obras eminentemente decorativas. Cuando los recursos son limitados y las finanzas están estrechas, tienes que dedicarlos a invertir en necesidades básicas, estratégicas”, enfatizó.
En el marco del espacio informativo Chihuahua Adelante, se dieron a conocer los detalles y beneficios de estos proyectos que lleva a cabo la actual administración estatal en beneficio directo de un estimado de 90 mil habitantes, así como de todas las personas que transitan por el sector.
“Uno de los grandes problemas de Juárez en términos de su crecimiento urbano fue precisamente la mala planeación de ese crecimiento, que dejó a un lado el tema del drenaje pluvial, y esa falta de visión y de planeación, lo que hizo es que se generaran inundaciones en muchas partes de la ciudad, afectando a personas, propiedades, vehículos y el pavimento de las calles”, expresó Javier Corral.
Desde el cruce de las calles Rancho Agua Caliente y Rancho Las Cabras, del Fraccionamiento “Pradera Dorada”, un sector que durante décadas se ha inundado cada vez que llueve, ya que cuenta con pendiente bajas y carece de salida para los escurrimientos, se iniciaron los trabajos desde el 16 de diciembre del año pasado.
Con estas acciones de rehabilitación y ampliación, se incrementará la capacidad de almacenamiento de los escurrimientos asociados a una tormenta, así como del funcionamiento hidráulico, que están diseñados para que el agua que cae en estos almacenamientos, sea desalojada por infiltración hacia los acuíferos del subsuelo. Como parte de este proyecto, se mejora también la pavimentación y canalización, para desalojar el agua de las calles con la mayor rapidez posible.
Óscar Ibáñez, indicó que el Fideicomiso de Puentes Fronterizos permite atender estas necesidades que al menos durante 40 años padecieron las y los vecinos.
Desde el vaso norte uno, con capacidad de almacenamiento de 8 mil 885 metros cúbicos, en una superficie de 2 mil 553 metros cuadrados, con una altura máxima de corona de 8 metros, se informó que el avance es de más del 80% y que se rehabilita el canal 3, que tendrá una longitud de 224 metros, a lo largo de Rancho Agua Caliente, desde Rancho El Becerro hasta Rancho Las Cabras.
Informó que la arena fina que se está colocando en la base, permite infiltrar con mucha rapidez el agua que se conduce desde las calles a través de los diversos canales que se construyen, y que la interconexión de estos espacios de absorción, permitirá que al llenarse el primero, el agua continúe fluyendo hacia el segundo, que tiene una mayor capacidad.
Con la colocación de gaviones, comentó que se da estabilidad a los taludes, ya que permite una caída suave del agua, impidiendo la erosión y un posible derrumbamiento.
Óscar Ibáñez destacó que para el diseño, se contó con el apoyo de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), así como de personas expertas en hidráulica e incluso en sísmica.
Al recorrer el vaso sur, que es el principal y que se entregará el 19 de septiembre próximo, indicó que su capacidad es de más de 27 mil metros cúbicos de agua, una superficie de más de 10 mil metros cuadrados y una profundidad de 10 metros. Destacó que el material que se utiliza, tiene una vida superior a los 50 años.
El Director Ejecutivo de la JCAS, comentó que se pavimentaron las calles con concreto hidráulico, se arborizará la zona, lo cual dará una mejor imagen y constituirá un área de recreación para las familias; por otra parte, dijo, se busca implementar algún tipo de actividades y paisajismo en estos sitios, que tendrán un fondo de arena, para que puedan utilizarse cuando no es temporada de lluvias.
Finalmente, en la supervisión de la tercer obra ubicada en la zona norte dos, que se construye en una superficie de 3 mil 500 metros cuadrados, con una capacidad de cerca de 5 mil metros cúbicos de agua, y una profundidad de 3.50 metros, indicó que se concluirá entre el 20 y el 30 de octubre.
“Un dato muy importante que pone en perspectiva el valor de estas obras, es que todo el drenaje de este lugar estaba destruido por las constantes inundaciones”, entonces, dijo, la gente tenía sus drenajes tapados, lo cual ocasionaba una baja en el valor de las viviendas, por lo que consideró que el impacto en la plusvalía es muy positivo. “Cuando una ciudad tiene drenaje pluvial, se reducen las pérdidas, se mejora la imagen y se recupera la plusvalía de toda la ciudad”, puntualizó.