Detectar anomalías en boca y cuello podría prevenir el desarrollo de cáncer de cabeza y cuello

  • El 27 de julio se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Cabeza y Cuello.
  • La detección oportuna y el tratamiento adecuado mejoran la calidad de vida y el tiempo
    de supervivencia de quien padece este tipo de tumores, que cada vez tienen mayor incidencia en México.

Ciudad de México.- El cáncer de cabeza y cuello es uno
de los tumores con mayor impacto en el mundo y en México, y aunque su
incidencia es baja, ya que representa solo el 3% de las de los tumores sólidos,
es el causante de por lo menos 300,000 muertes al año en el mundo. En América
Latina, cada año se diagnostican 52,889 casos nuevos de tumores de cabeza y
cuello. Lamentablemente hasta 3 terceras partes de los pacientes se presentan
con enfermedad avanzada. El diagnóstico oportuno puede disminuir
significativamente el riesgo de mortalidad y que ésta, depende en muchas
ocasiones de la revisión constante de nuestro cuerpo, principalmente de la
garganta y la boca, poniendo especial atención en ellas y dándoles el cuidado
que requieren.

El descubrimiento de anomalías en la garganta, lengua, paladar y encías es una
herramienta fundamental para reconocer que existe un problema y acudir con un
especialista que, tras una exhaustiva revisión, descarte la formación de tumores
o el desarrollo de células cancerosas.

“En muchas ocasiones, pequeñas lesiones o llagas, que comúnmente se
confunden con lesiones conocidas como aftas, que aparecen en la boca o la
laringe, son poco perceptibles y se dejan pasar sin mayor detenimiento.
Lamentablemente, de todos los tumores de cáncer de cabeza y cuello, el de la
boca, es el más frecuente y cuenta con una mortalidad muy alta, pues el 70% de
los pacientes que acuden al médico llegan en etapas avanzadas de la

enfermedad”, expuso el Dr. Miguel Ángel Álvarez Avitia, Médico Oncólogo,
adscrito al Instituto Nacional de Cancerología, en el marco del Día Mundial
contra el Cáncer de Cabeza y Cuello, que se conmemora el 27 de julio.
Los tipos de cáncer de cabeza y cuello más frecuentes son el de boca, que se
presenta sobre todo en la lengua y el paladar; el de amígdalas o anginas y el de
laringe.

“Al ser tumores que invaden a profundidad los tejidos, son propensos a
desarrollar metástasis o propagación de las células malignas a lo largo de los
ganglios del cuello, además, son tumores muy vistosos, lo que provoca que
aunado al dolor que ocasionan y la afectación de funciones esenciales como
comer, hablar y respirar; los pacientes vean ampliamente afectada su vida
profesional, al estar discapacitados laboral y personalmente, al impactar
directamente en su autoestima”, comentó el especialista.

Aunque se conoce que este tipo de cáncer se presenta principalmente en
personas mayores a los 50 años y por lo general tiene mayor prevalencia en
hombres que en mujeres, se cree que la incidencia de estos tumores va en
aumento en personas jóvenes, ya que el estilo de vida y algunas prácticas que se
han vuelto comunes, son algunos de los principales factores de riesgo para el
desarrollo de esta enfermedad: fumar, beber, mantener malos hábitos higiénicos
bucales e, incluso, realizar prácticas sexuales orales sin protección, que generen
contagios por virus como el del Papiloma Humano (VPH), son elementos que
favorecen la modificación de células normales a cancerosas.

En palabras del Dr. Álvarez Avitia “Algunos de los principales síntomas que se
presentan en esta enfermedad son: dependiendo del sitio afectado, dolor en
garganta o cuello, dolor para la deglución o “pasar alimentos”, disfonía o
“ronquera”, en casos más avanzados, tos y dificultad para respirar, y es común
detectar la presencia de nódulos en cuello abultados y duros”.

En este sentido, al ser una amplia y variada cantidad de síntomas los que se
presentan, pueden confundirse con otro tipo de padecimientos como una gripe o
infección de las vías respiratorias, por lo que resulta necesario estar alerta a
cambios en la cavidad bucal, alteraciones en la saliva o cualquier tipo de
anomalía física que se descubra desde la zona de la nariz, boca, garganta y
cuello.

Para tratar este tipo de cáncer es necesario contar con un grupo de especialistas,
que realizan procesos médicos que van desde cirugía, radiación y quimioterapia,
y la mayoría de estos pacientes requiere más de una modalidad de tratamiento.
Para los pacientes de enfermedad muy avanzada o recurrentes, donde muchas
veces los esfuerzos terapéuticos eran infructuosos, afortunadamente, el avance

en las innovaciones científicas para tratar esta enfermedad mejora día con día,
por ello, actualmente se cuenta con un mayor número de terapias disponibles
que, en conjunto con los tratamientos tradicionales, permiten mejorar la calidad
de vida de los pacientes y ampliar sus expectativas de supervivencia.
En el marco del Día Mundial contra el Cáncer de Cabeza y Cuello, se invita a
tomar conciencia sobre la detección oportuna de este tipo de tumores y a acudir
inmediatamente con un especialista cuando se presente algún síntoma o
anomalía en la salud.