Cuando la visión institucional va contra tema de vida o muerte como el agua para Ojinaga, se deben atener a las consecuencias…

Por: Profr. José Guadalupe Olivas Olivas

Sr. Juan Carlos Loera, delegado del gobierno Federal en el Estado de Chihuahua. Antes de dar estas declaraciones, de decir que el agua para Ojinaga está asegurada para este ciclo de riego, debe usted pensar que cientos de agricultores de la región dependen total y absolutamente del sistema de riego para hacer producir sus tierras. A lo mejor usted no se acuerda, pero ha habido en el Estado, sequías que se extienden por años y si su único argumento es decir que se tiene asegurado este año de riego, déjeme decirle que su argumento es muy pobre y estúpido, cree usted que la gente de Ojinaga somos unos ignorantes y no tenemos la capacidad de razonar sobre lo delicado que es el tema del agua en la región de Ojinaga y sus alrededores…

No se equivoqué licenciado Loera, porque hasta con la simple experiencia de vivir cada año temperaturas arriba de los 50 grados centígrados a la sombra y ha sabiendas que la lluvia es escasa por las características propias de las regiones desérticas, hasta un niño le puede deducir que reducir el agua del Granero o de La Boquilla, es atentar contra la misma vida de sus residentes y de una cosa estoy seguro, que si en dos años no llegará a llover (toco madera) usted no se va a parar en Ojinaga, ante miles de ciudadanos a dar una explicación y mucho menos a dar una solución. Le pido de la manera más atenta, así como se escuchó a los pobladores de Baja California para cancelar la cervecería, por los mismos argumentos que aquí le estoy exponiendo, escuche la voz del pueblo de Ojinaga.

Hace más de 25 años se vivió una gran sequía en nuestro Estado, y recuerdo muy bien de niño, que la gente se lamentaba por haber vaciado las presas pensando en que para el próximo año se llenarían y fueron años muy duros no solo para los agricultores de Ojinaga, sino para todos los agricultores de nuestro Estado.

Urge una reestructuración de ese tratado porque solamente el Estado de Chihuahua ( a pesar de ser un Estado desértico) tiene el compromiso de pagar solo (de soledad, por eso sin acento) a Estados Unidos la mitad del agua que se le tiene que pagar. Las condiciones jamás serán las mismas que se tenían en el Estado hace casi 80 años.

No quiero exagerar, pero si usted no defiende primero a nuestra gente, si no defiende que el agua de Chihuahua sea para los chihuahuenses, combinado con algunas situaciones meteorológicas, podría usted ser el que sea corresponsable de un posible ecocidio en la región, porque el agua señor Loera no solo es vital para el campesino, sino para todo ser vivo (flora y fauna), así que antes de pensar en quedar bien como delegado, piense humanamente que es lo correcto.

Quedo a sus órdenes…

José Guadalupe Olivas Olivas.

Orgullosamente nacido en la perla del desierto (así que me dirijo a usted desde la vertiente teórica, pero también desde el punto de vista empírico)