El Ingreso Vital es un acto de justicia para millones de personas que por una circunstancia extraordinaria perdieron su trabajo o sus ingresos, dijo el senador Clemente Castañeda.
Los legisladores de Movimiento Ciudadano presentaron hoy ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la iniciativa que establece el Ingreso Vital como un derecho para los mexicanos.
La propuesta que ayudaría a 20 millones de personas afectadas por la crisis económica, fue construida con las aportaciones de académicos, activistas, sindicatos y trabajadores.
El Ingreso Vital deber ser un derecho inalienable para los mexicanos y mexicanas. El Estado tiene que ser responsable, solidario y recíproco con todas las personas que, debido al confinamiento social para evitar el contagio del COVID-19, perdieron sus empleos o sus ingresos, expresó el senador Clemente Castañeda Hoeflich.
En video conferencia, el coordinador nacional de Movimiento Ciudadano, junto con senadores y diputados, académicos y representantes de organizaciones civiles y sindicales, presentó hoy la iniciativa de Ley del Ingreso Mínimo Vital, con la que se ayudaría a más de 20 millones de personas afectadas por la crisis económica con un salario mínimo durante tres y hasta cinco meses.
“Para millones de familias que viven al día, el Ingreso Vital es un auxilio que puede marcar la diferencia entre pasar o no, a una situación de pobreza, incluso de pobreza alimentaria. Hoy por hoy, es una medida sanitaria porque su existencia les permitirá a millones que hoy están desesperados por salir a trabajar, quedarse en casa y así evitar un rebote de la pandemia”, dijo.
La Ley del Ingreso Vital que presentan hoy legisladores de Movimiento Ciudadano en la Comisión Permanente plantea:
– Reconoce el derecho de las personas que vieron afectados sus ingresos en una situación especial, a recibir un apoyo monetario de parte del Estado.
– Define el acontecer de una situación especial como aquella en la que se ve gravemente afectada la economía y la ocupación laboral, recurriendo a la información del IMSS, del Banco de México y de las propias dependencias del Gobierno Federal.
– Lo podrán recibir todas las personas que perdieron su empleo y que vieron afectados sus ingresos, sin importar si se encuentran en la formalidad o la informalidad.
– El apoyo se otorgará durante 3 meses y será equivalente al salario mínimo, es decir, más de 11 mil pesos en total, y podrá ampliarse hasta por dos meses más.
Según datos oficiales, con la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus, en México alrededor de 2 millones de personas perdieron su empleo formal, 12 millones más perdieron sus ingresos a causa de la suspensión de actividades y 11 millones están subcontratadas.
“Si este Ingreso Vital lo destináramos a 20 millones de mexicanos y mexicanas, estaríamos hablando de una erogación de poco más de 220 mil millones de pesos: un punto porcentual del PIB nacional. Desde luego que hay recursos para sufragar este apoyo, simplemente es cuestión de que el Estado mexicano reordene sus prioridades”, dijo Castañeda Hoeflich.
La iniciativa se construyó con las aportaciones de académicos, activistas, trabajadores, sindicatos como la CROM y organizaciones civiles como Nosotrxs, el Instituto Simone de Beauvoir y el Centro de Apoyo y Capacitación de Empleadas del Hogar.
El doctor Mauricio Merino, coordinador de Nosotrxs, señaló que el Ingreso Vital no compite con ninguno de los programas sociales del Gobierno de México, sino que atiende a las personas que no están recibiendo ningún apoyo. “No hay contradicción con la filosofía política del Gobierno de la Republica”, sostuvo.
Países de Europa y de América, han adoptado alguna medida similar para apoyar a las personas que perdieron su empleo o sus ingresos. En México estamos a tiempo, dijo el senador Clemente Castañeda Hoeflich.