– O la política pública en la materia se traduce en presupuesto público o quedará en nada, asegura
Chihuahua, Chih.- En su participación a primera hora de esta tarde en la instalación del Observatorio de Resoluciones con Perspectiva de Género del Tribunal Superior de Justicia, el gobernador Javier Corral Jurado aplaudió esta “extraordinaria iniciativa”, haciendo hincapié en que los poderes del estado están obligados a ser parte del cambio que impulsa la revolución de conciencias feminista y que o se traduce en “presupuesto público” para la causa o quedará en nada.
El mandatario estatal volvió a incidir en que habrá “un antes y un después” después de las movilizaciones que las mujeres llevaron a cabo en Chihuahua, México y todo el planeta los pasado 8 y 9 de marzo, mismas que reiteró tienen toda la fisonomía de una nueva revolución de conciencias en torno a la causa feminista.
Aseguró que llevado este empuje al terreno de la voluntad política “hechos son amores y no buenas razones” y la política pública se debía traducir en presupuesto público o todo este movimiento feminista quedaría en nada.
Corral sostuvo que las mujeres “requieren que los poderes del estado, los niveles de gobierno y las instituciones públicas sean responsables y estén a la altura que les corresponde” para que sus derechos sean garantizados, y puedan vivir en igualdad, pero sobre todo libres de violencia y de discriminación, que eran las principales demandas de las recientes movilizaciones.
“Los poderes del Estado estamos obligados a ser parte del cambio”, apuntó, ya que era desde estos desde donde se podían generar los cambios profundos que se estaban demandando y donde más se podía combatir el problema de fondo, la cultura machista- misógina que había imposibilitado el desarrollo de muchas mujeres.
Es por ello que consideró la instalación de este Observatorio “una extraordinaria iniciativa” y sobre todo que se diera en el seno del Poder Judicial. Agregó que este tipo de decisiones orea y eso era importante, asegurando que en estos temas eran preferibles los excesos del escrutinio a la rémora del ocultismo.
