El desprecio del SNTE Nacional a la base de la Sección 42

Opinión por: Maestro José Gpe. Olivas Olivas

Por todos es sabido que la sección 42 del SNTE no preocupa y mucho menos ocupa al Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, pues en la pasada Reforma Educativa peñanietista, jamás se contemplaron los derechos adquiridos por la sección 42, no hubo ni un solo artículo o transitorio en la Ley General del Servicio Profesional Docente que hablara sobre las conquistas de las secciones estatales en el país y mucho menos que especificaran las de la sección 42, siempre se manejó el término “carrera magisterial” y el mismo comité seccional explicaba que “carrera magisterial” era equiparable a la Plaza de Tiempo Completo Mixto en la Ley. Mentira todo fue una mentira, unos ni sabían lo que decía la Ley, y otros como el secretario general en ese entonces, el hoy presidente del congreso local, el profesor René Frías Bencomo, preocupado más por su candidatura, traicionó la confianza que se depositó en él, al ser electo estatutariamente para defender todos los derechos adquiridos; pretendió “defender” con una minuta, un acuerdo local, lo que en el artículo tercero y sus leyes secundarias arrebataba con una barbarie  de un solo plumazo el patrimonio de las familias pertenecientes al subsistema estatal chihuahuense.

Pero no solo es culpa de dicho personaje, sino que en su momento Juan Díaz de la Torre Secretario General del SNTE nacional, no hizo ninguna observación a la ley, mucho menos iba a manifestarse en contra de la ley, pues ya le habían tapado la boca con miles de millones de pesos no solo para callar, sino para promover y  apoyar la Reforma educativa y con ello dejó a la deriva  las prestaciones de las secciones estatales del país, podrán decir que hubo un tiempo para armonizar las prestaciones adquiridas en la ley, pero solo serían para  quienes ya poseían esas conquistas dejando a los maestros noveles condenados a una vida de miseria y poniendo en evidencia con ello, que al menos la sección 42 y sus conquistas no le importaba al SNTE nacional.

Hoy el SNTE nacional vuelve a manifestar, no sólo su indiferencia por la sección 42, sino su desprecio a la base de esta sección, que en representación de los valientes maestros jubilados, decidieron tomar las oficias de la sección 42, demandando se impacte correctamente el incremento  en diversos rubros el pago para todos los maestros en activo, se deje de cobrar una cuota ilegal a los maestros jubilados, se mejore el servicio médico de Pensiones Civiles del Estado, se haga una disculpa pública a las maestras jubiladas que fueron violentadas físicamente el día 4 de diciembre al ser tomadas por primera vez las instalaciones y por último, piden se haga una declaración patrimonial por parte de todos los integrantes de comité seccional. Yo pregunto a la sociedad en general y en específico a los maestros estatales ¿A caso las demandas de nuestros compañeros jubilados no son justas, legítimas y viables? Entonces por qué el SNTE nacional encabezado por el maestro Alfonso Cepeda Salas, al ver la actitud del Señor Ever Avitia Estrada, de negarse al diálogo con sus representados y no importarle en lo más mínimo, ni su integridad física, ni mucho menos atender las demandas que se le plantean en favor de toda la base, no interviene, no manda un delegado especial que primero se informe objetivamente de lo que pasa con los maestros estatales en el Estado de Chihuahua y luego exija que se dé el diálogo en beneficio de miles de maestros y sus familias.

Ya es más de un mes que nuestros compañeros hermanos jubilados están día y noche a tambor batiente, exponiéndose al frío, enfermedades y hasta posibles asaltos poniendo con ello su integridad física, luchando por el bien de todos, por el bien común y triste es saber que para el SNTE nacional y Seccional, solo somos importantes cuando se acercan los tiempos electorales, pero cuando a gritos pedimos al nacional que nos escuchen, nos defiendan, nos apoyen no hay eco.

Quizá el SNTE nacional no solo sepa sobre la corrupción que atañe a la sección 42, quizá pretende esconder esa corrupción, o quizá también se beneficie de esa corrupción. Quizá y solo quizá por eso los maestros de la sección 42 somos eso… los despreciados del SNTE nacional.