Víctor se cruzó, literalmente, por nosotros, sin renunciar jamás a sus convicciones de izquierda apostó por este proyecto para liberar y democratizar Chihuahua: Corral

Chihuahua, Chih.- El gobernador Javier Corral Jurado despidió entre elogios y muestras de gratitud de su gabinete de gobierno a Víctor Quintana Silveyra, de quien dijo cosas como que era un político auténtico y una persona comprometida con la sociedad. Le agradeció que en 2016, a través de la Alianza Ciudadana por Chihuahua, antepusiera la importancia de una unión sin precedentes para recuperar y democratizar el Estado, durante su tiempo como secretario de Desarrollo Social, durante el cual enfatizó que nunca abandonó su ideología de izquierdas, colaboró por hacer una realidad el modelo de desarrollo social en base a los derechos humanos, mismo que aseguró hoy es referente nacional. Afirmó ser respetuoso de su intención de retomar proyectos personales y políticos y le deseó suerte.

 

En su intervención el titular del Ejecutivo chihuahuense empezó externando su “sentimiento de gratitud, reconocimiento y admiración que desde hace muchos años y particularmente viendo su desempeño en el Gobierno he profesado por Víctor Quintana”.

Refirió que Quintana un personaje singular en la política chihuahuense, en la lucha social, en la batalla democratizadora, antes de recordar cómo el caminó unió a dos personas y dos políticos que venían de corrientes e ideologías tan diferentes.

“En este momento en el que ambos hemos concluido que ha terminado su ciclo en nuestra administración y a propuesta de él, es que yo quiero recordar el momento preciso en el que Víctor Quintana se apostó por un proyecto de liberación para Chihuahua como fue el proyecto que construimos en la Alianza Ciudadana por Chihuahua para la renovación de la gubernatura”, empezó señalando.

“Porque en su caso y junto con otros chihuahuenses, Víctor se cruzó, literalmente, por nosotros, incluso profesando una militancia política distinta a la mía, particularmente partidaria, y desde esa trinchera tuvo la capacidad, la madurez democrática que se necesita para entender que la política es local y que Chihuahua requería del esfuerzo de todos, hombres y mujeres de buena voluntad, más allá de partidos e ideologías para recuperar el estado como lo hicimos y sentar las bases de la democratización”, prosiguió.

Corral quiso agradecer a Quintana su solidaridad, jugando riesgos, e “incluso cómo terminó siendo incomprendido por su propio partido o por algunas personas de su propio partido que no fueron capaces de comprender que la política local y a veces las razones de la tierra propia son más importantes que las estrategias nacionales”.

Como secretario, aseveró, fue una parte muy importante en la “construcción de uno de nuestros más grandes orgullos, que es la visión social del Gobierno de Chihuahua, porque pudo desarrollar un modelo de Desarrollo Social incluyente, participativo, que atajó desigualdades y vulnerabilidades, no a partir del asistencialismo, sino del desarrollo de capacidades, de colocar el desarrollo social como un tema, una política integral de derechos humanos y, añado, crear una red de cuidado de las personas, particularmente de las niñas y de los niños”.

Dio a conocer que fue el pasado diciembre que Quintana le planteó sus proyectos profesionales y políticos “que quería recuperar” y cómo él le pidió dejar pasar el Tercer Informe y cerrar este ciclo antes de dejarlo marchar.

“Algo les puedo asegurar, Víctor jamás renunció a sus convicciones políticas, a su pensamiento político, a su ideología, filosofía política, hombre de izquierda, aquí así se le respetó y con ese carácter se le invitó. Ni le conculcamos ni le limitamos y le dimos la libertad para construir un modelo que hoy es referente a nivel nacional aunque a veces nos lo quieran regatear adversarios propios o incluso compañeros de él”, sentenció Corral, antes de desearle todo el éxito en lo que emprenda.

“En él habita un hombre bueno y una conciencia feliz, de político auténtico y de hombre comprometido con la sociedad”, concluyó antes de fundirse ambos en un abrazo.